- ¿Cómo se han adaptado en Dolulaguna, el servicio de apoyo al duelo de Debagoiena, a la situación excepcional provocada por el coronavirus?

-Hicimos nuestras últimas sesiones presenciales el 13 de marzo. Desde ese día, por precaución sanitaria, las terapias las estamos ofreciendo vía telemática. De momento, la mayoría de las personas atendidas ya estaban en duelo antes de la pandemia. Normalmente, una de las razones por las que se complica un duelo por una muerte es el aislamiento, y en la situación que vivimos este ha sido obligatorio. Por tanto, para una persona que esté pasando por un duelo complicado su vivencia se ha multiplicado. Hemos recibido, además, nuevos casos surgidos a causa del coronavirus; personas que están luchando con la enfermedad a un nivel muy grave o que han fallecido como consecuencia del virus. En esta nueva situación el trauma se agravará por las medidas que se han tenido que tomar y esto hará que el duelo se complique, pero todos los duelos tienen y tendrán una resolución.

El difícil trance de afrontar la pérdida de un familiar o un amigo sin acompañarle en sus últimos días de vida, sin despedidas, sin besos, abrazos ni apretones de manos. ¿Cómo se abordan estos casos?

-Sin duda, el coronavirus lo ha cambiado todo, incluso los rituales para acompañar a los enfermos y despedirnos de quienes mueren. Esto ha llegado sin previo aviso, sin tiempo para pensar, sin preparación. Desde Dolulaguna sabemos que todas y todos, sin excepción, nos enfrentamos a la realidad de que alguien querido muera, o incluso nosotros mismos muramos, y esto genera desasosiego, impotencia€, sensaciones normales ante una situación llena de interrogantes. Y aún así, seguimos contando con alternativas que aunque no son lo que esperábamos, emergen de la creatividad de nuestro sentir y pueden ayudarnos a hacer una despedida. Durante esta pandemia habrá duelos que se complicarán pero no necesariamente. Si la situación es muy abrumadora y las emociones nos sobrepasan podemos pedir la ayuda de un profesional para sobrellevarlo.

En la situación actual, ¿cómo se puede dar el último adiós a un ser querido fallecido por COVID-19 u otras causas?

-Cuando volvamos a la normalidad tendremos que reinventarnos en muchos sentidos y uno de ellos será este. En este momento, desde Dolulaguna hacemos varias propuestas para afrontarlo: ante la posible muerte, tomar conciencia, buscar apoyos e iniciar la forma que uno quiera para despedirse; buscar algún enlace, alguien que pueda acudir, algún profesional que se encuentre cerca del enfermo para transmitirle lo que queremos hacerle llegar; hay que recordar que el duelo es familiar y como tal es importante atender a las necesidades de los demás, planificar conjuntamente cómo hacer la despedida hoy y cómo la haremos cuando se termine esta situación; cada cual sabe qué es lo que más le ayuda, si le sirve escribir, dibujar, ver fotos€; el duelo, el dolor, se vive desde la conexión con el mismo y con todo el torbellino emocional que supone, y la desconexión a ratitos, de distraerse, darse treguas y descansar. No hay que olvidarse de los niños o adolescentes, también forman parte del proceso y merecen ser informados, recibir respuestas hasta dónde podamos darles.

El coronavirus ha anulado los ritos funerarios, pero llegará el momento de las despedidas comunitarias. Dolulaguna va a incorporar un servicio de ayuda para la celebración de funerales civiles.

-Así es. Los rituales nos sirven para honrar, expresar el dolor, acompañarnos, dar simbolismo a lo ocurrido, ayudarnos a integrar la realidad€ La despedida al lado de la persona enferma, el velatorio, el funeral€, en muchos casos no está siendo viable. Por eso es necesario reinventarnos. Muestra de ello es el proyecto de funerales civiles que estamos impulsando con la colaboración de Mikel Alberdi e Ibai Zangitu de AZ Gaubelak. Muchos de los ritos han sido aplazados durante el confinamiento y esta iniciativa dará la opción de celebrar un rito civil acorde a las voluntades de la persona fallecida y sus allegados. Las personas que quieran hacerlo pueden solicitarlo desde este momento llamando al 699 84 35 80.

¿A qué otras iniciativas surgidas del confinamiento se han sumado?

-Participamos en dos iniciativas promovidas en Aretxabaleta. Colaboramos con la red de voluntariado dirigida al cuidado ciudadano, en la que ofrecemos el apoyo al duelo como opción para este momento de vulnerabilidad que estamos viviendo todos y todas. Y, por otro lado, Dolulaguna es parte activa de la iniciativa hemengaz.eus, pensada para impulsar el comercio y los servicios locales afectados por el impacto económico de la pandemia. Entendemos que en la unión está la solución.

"Si la situación es muy abrumadora y las emociones nos sobrepasan podemos pedir ayuda a un profesional para sobrellevarlo?