- Los ediles de PSE y EH Bildu en la Corporación eibarresa aprobaron en el Pleno del pasado lunes el convenio a suscribir con Euskal Trenbide Sarea (ETS) para posibilitar la construcción de un paseo peatonal cubriendo las vías del tren entre Estaziño y Azitain. Dicha decisión se adoptó en una sesión plenaria a la que acudieron decenas de vecinos de la zona Este contrarios a la ejecución del proyecto y sin que los ediles del PNV y Elkarrekin-Podemos participaran en la votación "porque es un fraude a la ciudadanía y nos negamos a ser partícipes del mismo".

En palabras del portavoz jeltzale, Josu Mendicute, "se ha aprobado un convenio sin tener el proyecto, sin estudiar alternativas, sin escuchar a las personas afectadas y sin negociar con los demás partidos". A su entender, "estamos ante una decisión ilegítima fruto de una negociación a puerta cerrada entre PSOE y EH Bildu".

El grupo municipal del PNV defiende que el Ayuntamiento impulse la regeneración de la zona Este de la ciudad "sin chantajes"; que es lo que, a su juicio, supone "el viraje" de EH Bildu "por condicionar la regeneración de Barrena a la cobertura de las vías de tren en la calle Barakaldo".

Según Mendicute, "no se puede liderar un proyecto de regeneración de un barrio de espaldas a quienes viven en el mismo. Se ha impuesto una mole de toneladas de hormigón que entierra a las viviendas de Asua Erreka, Barakaldo y Electrociclos, en contra de las vecinas y de los vecinos y sin darles una oportunidad para conocer el proyecto".

En este sentido, el portavoz del principal grupo de la oposición municipal subraya que "más allá de que un proyecto nos parezca o no adecuado, es obligación de los servidores públicos cumplir la palabra dada" y recuerda que "si EH Bildu no hubiera votado a favor, esto no hubiera salido adelante", por lo que "sobre sus votos y su conciencia pesarán las toneladas de hormigón que van a poner por encima de las casas de estos vecinos".

El concejal nacionalista también se reafirmó en el compromiso que su grupo adquirió con las personas residentes en la zona Este de Eibar hace dos años: "no vamos a aceptar absolutamente nada si previamente no conocemos las afecciones a quienes viven en su entorno y no avanzaremos sin previamente reunirnos con las vecinas y vecinos, con quienes queremos acordar las alternativas". Además, Mendicute aclaró que el alcalde, Jon Iraola, se ha negado a hablar de este tema con el PNV: "no quiere acuerdos con nosotros porque sabe que con el PNV este proyecto, con estas características y en estas condiciones, no se hubiera aprobado".

Para la formación jeltzale la apuesta de regeneración de la zona Este debe pasar por recuperar las calles para las personas: "Van a meter 20 millones de euros en un proyecto que deja de lado a Urkizu, Karmen, Barakaldo y Barrena. Pretenden sacar a la gente de las calles para mantener el protagonismo de los coches. El Ayuntamiento va en la dirección contraria a lo que sería una revitalización comercial de toda la zona".

Desde las filas jeltzales no dudan en que este movimiento realizado por el PSOE y EH Bildu responde a intereses ajenos a la ciudad. "Desde el PSOE pretenden desplazar al PNV de la centralidad que representa en Eibar y EH Bildu tiene sus propias prioridades. Sólo les pido que no utilicen a nuestra ciudad como un juguete para sus experimentos", sentencian.