- El Ayuntamiento de Eibar y la empresa Dragados han alcanzado un acuerdo que pone fin al contencioso existente desde que en diciembre de 2017 el Consistorio decidiera rescindir el contrato de la obra de construcción del complejo multiusos de Errebal. Según ese acuerdo, Dragados desiste de continuar con todos los procesos iniciados contra el Ayuntamiento a raíz de la citada rescisión y abonará 350.000 euros al Consistorio en compensación por los daños y perjuicios que su actuación le han causado.

Para el concejal eibarrés de Obras, Jon Iraola, el hecho de que Dragados desista de estos procedimientos judiciales "supone el reconocimiento de que el Ayuntamiento tenía razón, de que teníamos motivos para rescindir el contrato de obra y de que, en consecuencia, actuamos correcta y justificadamente, algo de lo que el equipo de Gobierno estuvo convencido desde el primer momento".

El Consistorio armero decidió rescindir el contrato que había adjudicado previamente a Dragados para la ejecución de las obras de Errebal por entender que la constructora lo estaba incumpliendo, "esencialmente, en lo referido a los plazos de ejecución de la obra".

Aquella decisión fue avalada por la Comisión Jurídica Asesora de Euskadi, que dictaminó que el Ayuntamiento había actuado correctamente al rescindir el contrato. Sin embargo, la empresa Dragados decidió llevar el asunto a los Tribunales, presentando dos demandas judiciales contra el Ayuntamiento: la primera contra la decisión de rescindir el contrato de la obra y la segunda contra la liquidación final, por la que Dragados reclamaba 311.513 euros.

Ahora, y como consecuencia del acuerdo suscrito esta pasada semana (está pendiente de homologación judicial) Dragados se compromete a retirar sendas demandas judiciales con carácter inmediato y a indemnizar con 350.000 euros al Consistorio por los daños y perjuicios ocasionados.