in negar las muchas dificultades que está padeciendo, parece que el sector cultural comienza a recuperar un cierto ritmo de trabajo que queda aún lejos de la normalidad. Ejemplo de ello es la ya consolidada feria Kontenporanea de Irun que, tras haber sido suspendida en 2020 debido a la pandemia del covid, este año ha celebrado su quinta edición en un formato reducido, de día y medio y con restricciones de aforos, pero en pleno centro de la localidad, en la plaza San Juan.

Haciendo honor a su nombre, la feria gira en torno al arte contemporáneo, de forma transversal. En ese sentido, el evento volvió a contar con una nutrida gama de disciplinas artísticas, como la pintura, la música, la fotografía, la danza o las artes visuales.

El hilo conductor de la feria fue el contraste entre lo interior y lo exterior como forma de reflexionar a raíz de lo ocurrido durante el confinamiento de primavera de 2020. Uno de los elementos centrales de Kontenporanea fue la exposición de imágenes impresas en lonas de gran formato fruto de una convocatoria internacional abierta y que contó con ocho obras de un diverso grupo de artistas. Los autores expuestos en la feria fueron Claire Le Pape (Burdeos), B/Z (Bilbao), Gaspar Acebo (Argentina), Jaime Yacaman (Mexico), Kontxi Gutierro (Hondarribia), Oksana Pohrebennyk (Ucrania), Silvia Jiménez (Bilbao) y Susana Ferreira (Irun).

Además de la muestra principal, del punto Leo Pum (en el que se pudo experimentar con la realidad virtual) y de la instalación artística Cayolar, el evento tuvo una importante agenda de actividades entre las que destacaron el concierto de la banda local Lanbroa del sábado, 24 de julio, o la clase magistral de confección de papel ecológico que ofrecieron desde Paperki.

Pero más allá de su importancia para el sector, Kontenporanea es siempre también una oportunidad para jóvenes irundarras. En cada edición, el área de Cultura del Ayuntamiento de Irun selecciona a tres personas de la ciudad que estén iniciando su carrera profesional para conformar el comité que organiza la feria, tarea que en este caso ha recaído sobre los hombros de Patricia Echegaray, Anne Bravo y Alba Aguado.

Después de haber vivido todo el proceso organizativo, las tres coincidían, en declaraciones a NOTICIAS DE GIPUZKOA, en calificar la experiencia de satisfactoria. "Fue muy bonito ver que a la gente le gustó lo que preparamos", aseguró Aguado, la encargada de comunicación del comité, que recalcó la popularidad del mercado de arte que tuvo lugar en el contexto de la feria. En ese sentido, la joven también lamentó el papel de la lluvia durante la feria, que impidió la celebración de un espectáculo de acrobacias con telas.

"Haber podido contar con tantas personas a las que les gusta el arte y la exposición ha sido muy enriquecedor", continuó Aguado, que valoró muy positivamente haber podido aprender diferentes técnicas organizativas y haber conocido a personas con tanta experiencia como Helga Massetani, la coordinadora del comité.