mediados del pasado mes de junio, el Ayuntamiento de Irun remató las obras de reurbanización del vial de la plaza del Ensanche. El objetivo de la actuación era dar protagonismo a la circulación peatonal, elevando la cota de la calzada para dejarla al nivel de las aceras, eliminando aparcamientos. Durante los trabajos, el tráfico rodado se tuvo que desviar hacia el barrio de Mendibil, donde además se cambió el sentido de circulación en varias de las calles para, en teoría, facilitar el tránsito de los vehículos.
Ya durante este periodo de obras, el tráfico de vehículos por Mendibil aumento "de forma exponencial". Así lo aseguran desde la Asociación de Vecinos del Centro de Irun, cuyos miembros se concentraron ayer en la plaza San Juan para protestar por la "poca receptividad" del Ayuntamiento a la hora de tratar los problemas ocasionados por dichos cambios.
Xole Agirre habló como portavoz de la asociación y recordó que las primeras quejas de residentes de Mendibil llegaron a la entidad en el mes de mayo. "Escribimos al Ayuntamiento para remitirles estas preocupaciones y nos recibieron el 14 de junio", narró Agirre, subrayando que dicho encuentro fue una mera reunión informativa en la que el personal técnico trasladó a la asociación los cambios de direcciones ya implantados en la nueva ordenación vial sin atender a sus quejas.
Por ello, la plataforma vecinal invitó al Ayuntamiento a participar en una reunión prevista para el 16 de junio en el Hogar del Jubilado de Luis Mariano para, esta vez sí, hablar sobre los problemas del barrio. "Desde el Ayuntamiento nos dijeron que no veían necesario reunirse con nosotros", explicó Agirre, aclarando que este rechazo a la interlocución con los vecinos es lo que ha causado la indignación de los residentes de la zona.
Otra de las vecinas concentradas en San Juan, Ana Merino, mencionó algunos de los problemas que aquejan a Mendibil, como el cambio de direcciones, que a pesar del final de las obras se ha planteado como permanente, y la problemática que ha causado en las salidas de muchos garajes privados, que estaban diseñadas para los sentidos de tráfico antiguos y que ahora carecen de visibilidad. El aumento del tránsito de vehículos por viales "que no están preparados para ello" o las "aceras estrechas, fuera de la normativa" son otras de las quejas del barrio, desde el que también denuncian falta de servicios comunitarios, como aseos públicos en el parque Mendibil.
La Asociación de Vecinos del Centro de Irun denuncia los problemas ocasionados por los cambios en el sentido de circulación de varias calles
