- Cuando el PSE-EE y Elkarrekin Podemos-IU anunciaron, a finales de noviembre, la formación de un Gobierno de coalición en Irun, el portavoz local de la formación morada, David Nuño, estaba de baja por paternidad. Unas semanas después, a mediados de diciembre, Nuño volvió a incorporarse al día a día municipal como nuevo delegado de Bienestar Social. Por ello, en su primera comparecencia ante los medios como delegado, aprovechó para valorar el acuerdo alcanzado con los socialistas, pacto que calificó de “positivo y más necesario que nunca”, debido a la necesidad de certezas que requiere la situación pandémica.

Más allá de la valoración política, Nuño quiso ahondar en su primera intervención pública como delegado en los retos que plantea como prioritarios en su nuevo cargo. Así, el delegado aseguró que es consciente de que la que gestiona es un área “clave” en el contexto actual para “no dejar a nadie atrás”. En ese sentido, Nuño explicó que su labor durante los primeros días de su gestión estuvo centrada en “hablar con las diferentes personas que trabajan en el área para poder hacer una radiografía de la situación”.

El delegado anunció, asimismo, que existe un compromiso para reforzar la plantilla del área con nuevo personal que se concretará más adelante, además de los cuatro fomentos de empleo que se incorporaron antes de finalizar el año.

En cuanto a acciones concretas, Nuño indicó que desde Intervención Comunitaria se quiere ampliar el parque de viviendas “para aquellas personas que lo están pasando mal y necesitan un lugar para volver a empezar”, trabajando en una oferta de viviendas tuteladas mediante el programa Housing First. Esto se complementará con un aumento de horas de trabajo en el centro de inclusión Zubia y con la flexibilización de los requisitos para acceder al comedor social de Irun.

Finalmente, Nuño hizo una mención especial a los mayores irundarras, un colectivo “especialmente sacudido” por la pandemia. Por ello, el delegado hizo hincapié en la apuesta del área por mejorar su bienestar con proyectos como el refuerzo del Servicio de Ayuda Domiciliaria o los centros de Lapice y San Miguel.