Para la gran mayoría, el verano ya ha llegado a su fin. Y es que los datos muestran que el 33% de los viajes se realiza en julio, el 35% en agosto y el 17% en septiembre.
Al regresar a la rutina, es momento de hacer balance del verano vivido en la comarca de Goierri, y las cifras de Goitur, la agencia de turismo de la comarca, ya ofrecen un panorama claro: más turistas, más diversidad y estancias más cortas. También han destacado cambios en la manera de viajar y de consumir.
Julio en alza
Julio, habitualmente ligado al turismo de negocios registró un aumento notable de visitantes de ocio. Los hoteles y pensiones alcanzaron en muchos casos el 90% de ocupación, mientras que los agroturismos y casas rurales se quedaron en torno al 58%.
El impacto más destacado fue el de los turistas internacionales, que impulsaron las cifras en museos y oficinas de turismo, con subidas de hasta un 50% respecto al año anterior.
Agosto intenso y desigual
En agosto, la ocupación de hoteles y pensiones alcanzó niveles muy altos, similares a 2024, manteniéndose en torno al 90% durante gran parte del mes. No obstante, la última semana registró menos reservas. En los agroturismos y casas rurales, la ocupación se situó en torno al 80%.
Cabe destacar que el calor intenso de las semanas centrales del mes limitó las visitas y excursiones por la tarde.
Madrid, Cataluña y Francia
En cuanto al turismo nacional, los madrileños fueron mayoría en julio, mientras que en agosto destacaron los visitantes procedentes de Cataluña. También aumentó la presencia de turistas de la Comunidad Valenciana, Andalucía y Canarias, así como de Galicia, Castilla y León, Aragón, Murcia, Castilla-La Mancha, Baleares y Extremadura.
Destaca, especialmente, el auge del turismo extranjero, que este verano aumentó con fuerza. Francia lideró la llegada de visitantes, seguida de Alemania, Estados Unidos y Reino Unido. Además, se registró un flujo estable desde Italia, Suiza, Portugal, Austria, Bélgica, Países Bajos, República Checa y Polonia. Desde América llegaron turistas de Argentina, México, Colombia, Chile y Brasil, junto con visitantes puntuales de Australia y Japón.
De la montaña al museo
Muchos turistas combinaron excursiones de montaña por la mañana con visitas a museos y espacios culturales por la tarde. El excursionismo fue clave, tanto de visitantes de otras comunidades autónomas como de vascos que este año optaron por viajar dentro de Euskadi y descubrir lugares cerca de casa.
Parte del aumento se debe además a excursionistas de día, nacionales y extranjeros, que recorrieron Goierri aunque pernoctaran en otros alojamientos cercanos como Urbasa, Lekunberri, Vitoria-Gasteiz, Oñati, Zarautz o Donostia.
Los peregrinos del Camino de Santiago y los senderistas de la Ruta del Queso Idiazabal GR 283 también contribuyeron a incrementar la afluencia en los museos y equipamientos turísticos por los que transitan estas rutas.
Estancias más cortas y variadas
La media de estancia se situó entre 3 y 5 noches, algo por debajo de años anteriores, aunque hubo visitantes que superaron la semana. Como novedad, algunas familias extranjeras eligieron pernoctar en Goierri a través del intercambio de casas, con ejemplos en Segura y Zerain.
Menos gasto en comidas
Aunque la afluencia de turistas fue mayor, el consumo en bares y restaurantes no creció al mismo ritmo; de hecho, bajó. Muchos decidieron reducir gastos desayunando en sus alojamientos o eligiendo comidas más económicas, como pintxos y bocadillos. Los restaurantes que permanecieron abiertos trabajaron bien, aunque algo menos que en otros veranos.
En los hoteles, además, bajó la contratación de media pensión y pensión completa, en parte para compensar la subida de los precios de los alojamientos y del viaje en general.
Estos datos confirman que la comarca de Goierri sigue consolidándose como destino turístico, capaz de combinar naturaleza, cultura y gastronomía, y de atraer turistas locales, nacionales e internacionales. Su reconocimiento se extiende cada vez más a lugares lejanos.