El restaurante Txurruka, uno de los establecimientos hosteleros más emblemáticos de Soraluze y de la comarca de Debabarrena, ha anunciado que cierra sus puertas esta semana.
Anuncio del cierre
El anuncio lo hizo público el lunes a través de un mensaje difundido en sus redes sociales, en el que agradece el apoyo recibido durante más de cinco décadas de trayectoria.
“Ha llegado el momento de poner fin a una etapa”, comienza el mensaje con el que la familia propietaria comunicó la clausura del negocio.
Emotiva despedida
En el texto se dirigen directamente a la clientela para dar las gracias “de corazón” a todas las personas que han pasado por el restaurante:
“A quienes vinisteis una vez, a quienes repetisteis cientos, a quienes habéis estado a nuestro lado todos estos años. Gracias por vuestras sonrisas, por las conversaciones, por la confianza y el cariño. También vosotras y vosotros habéis sido parte de nuestra familia, y eso no se olvida”.
Una saga familiar de mujeres
Fundado en 1969 por Begoña Anduaga como un sencillo merendero, el restaurante Txurruka fue evolucionando con el tiempo hasta convertirse en un referente gastronómico de la zona. Su crecimiento fue paralelo al relevo generacional dentro de la familia, y su historia está ligada al impulso y la dedicación de tres generaciones de mujeres.
Tras Begoña, el negocio fue gestionado durante años por sus hijas María Jesús e Idoia Etxeberria, quedando en manos de hermanas Iurdana e Ikerne Laskurain, nietas de la fundadora, la dirección del establecimiento en esta tercera etapa que ahora finaliza.