En la sesión plenaria del 26 de diciembre, el Ayuntamiento de Ordizia aprobó el Plan por el Clima y la Energía Sostenible, reafirmando su compromiso con la sostenibilidad y el medioambiente. Con esta iniciativa, el Consistorio apuesta por conseguir la neutralidad climática y fortalecer la resiliencia del municipio.
El plan, elaborado en colaboración con agentes locales, establece una hoja de ruta con objetivos específicos, especialmente hasta 2030, como la reducción del consumo energético municipal, la disminución de emisiones de CO2 y el incremento de la producción de energías renovables para autoconsumo. También incluye medidas para mejorar la eficiencia energética y reducir los gases de efecto invernadero en sectores como la vivienda, la actividad económica, la movilidad, el sector primario y la alimentación. Además, el Ayuntamiento de Ordizia busca optimizar el consumo y fomentar el ahorro energético en los equipamientos municipales, sirviendo de ejemplo para los distintos sectores existentes en la localidad.

Desde una perspectiva territorial y medioambiental, el Consistorio también busca anticiparse a los riesgos de inundaciones y sequías que puedan afectar al municipio, garantizando la salud y seguridad de la población ordiziarra. Todo ello se desarrolla con la participación activa de la ciudadanía. De hecho, la teniente de alcalde, Maitane Álvarez, destacó que “el Plan por el Clima y la Energía Sostenible se ha elaborado en un clima de consenso”. Para su redacción, se llevó a cabo un proceso participativo que incluyó entrevistas con agentes locales, ciudadanos y alumnos de los centros escolares de la villa. Además, el plan fue evaluado en comisiones municipales antes de ser aprobado por unanimidad en el último pleno municipal de 2024.
2030 y 2050
El Plan por el Clima y la Energía Sostenible establece una serie de objetivos para los próximos años, con la mirada puesta principalmente en 2030, pero también en 2050. Para 2030, el Ayuntamiento de Ordizia busca alcanzar un ahorro del 35% en el consumo energético municipal, conseguir al menos un 32% de producción de energías renovables destinadas al autoconsumo, priorizando su instalación cerca de la zona de consumo, y reducir las emisiones de CO2 en un 30%. De cara a 2050, el propósito es lograr un ahorro mínimo del 60% en el consumo energético municipal.
“Los objetivos que se concretan en el plan son exigentes pero están bien encaminados”, declaró Álvarez. “Hay cosas que ya están en marcha; se han colocado placas fotovoltaicas en el almacén municipal, en Majori y en en la cubierta de la plaza. No obstante, para llegar a los objetivos todavía hay que trabajar mucho”, agregó la teniente de alcalde.
Por su parte, Rosa Aurkia, del servicio de medio ambiente Laia Koop., destacó que el objetivo principal del plan es “disminuir el consumo energético y combatir el cambio climático”. Para lograrlo, se están implementando acciones como la sustitución del alumbrado público por tecnología led, la instalación de placas fotovoltaicas, el fomento de las zonas verdes y la creación de más puntos de carga para vehículos eléctricos, entre otras iniciativas.