El Festival de Cine Documental y Derechos Humanos de Errenteria ha dado por finalizada su tercera edición con la entrega de premios, que tuvo lugar en Cines Niessen. La gran vencedora del festival, al ganar tanto el premio del público a mejor cortometraje, como el Gran Premio Laboratorio Juanmi Gutiérrez del jurado profesional, fue el trabajo Zona WAO, de la directora Nagore Eceiza.
Conectar con las audiencias
En este cortometraje se subraya la crueldad de las extracciones petrolíferas y sus terribles consecuencias en las personas indígenas que habitan las zonas de extracción de la zona del Amazonas de Ecuador. "Que esta obra haya sido reconocida con dos ambos premios, pone en valor su capacidad para resonar tanto emocional como intelectualmente con las audiencias y con el jurado", señalan desde la organización.
Diversidad de enfoques
En palabras del jurado, "Zona WAO ofrece una diversidad de enfoques sobre una problemática, enriqueciendo el mensaje, enfatizando el doble castigo que se inflige sobre las mujeres en estas circunstancias". Nagore Eceiza no pudo acudir en persona al acto; en su lugar, el premio fue recogido por Gemma Hierro, miembro de MedicusMundi Gipuzkoa.
Mejor largometraje
Por otro lado, el primer premio del público para el mejor largometraje fue para Indarkeriaren Oi(h)artzunak de Amaia Merino y Ander Iriarte. El premio fue recogido por el director Ander Iriarte, que puso en valor la necesidad de creer a las víctimas de cualquier tipo de violencia y de escuchar todos los testimonios.
Proyección final sobre inmigración
Tras las proyecciones de los cortometrajes ganadores, el acto se cerró con la proyección, fuera de concurso, de Los cayucos de Kayar, de Álvaro Hernández Blanco, ganador de la primera edición del certamen y cuyo cortometraje es resultado de la asesoría realizada por el festival. La película refleja las tensiones y dilemas morales de la inmigración, al mismo tiempo que honra la resiliencia y los sacrificios de aquellos que buscan un futuro.
