Un ganso de oro, dos amigos y una bañera

El jurado, formado por la cineasta Ainara Elgoibar, el actor Martxelo Rubio y la bertsolari Nerea Ibarzabal, destacó el trabajo de Jone Arriola, eligiendo su obra entre las 20 seleccionadas para la fase final del veterano concurso lekeitiarra. “Se trata de una obra orgánica, natural y, sobre todo, fresca, que nos sitúa ante un diálogo convincente y tierno, que parece carente de guion, lo que requiere cohesión y mucho trabajo previo entre los actores y su directora”, señalaron en su valoración del trabajo de la elgoibartarra.

La figura del ganso, que identifica al certamen de Lekeitio, se acompaña de un premio en metálico de 3.000 euros que viene a confirmar la apuesta de Jone Arriola por lanzarse a la aventura de la creación cinematográfica. “Todavía no he asimilado la noticia. Tengo una mezcla de sensación de alegría, por un lado, y de agradecimiento, por el otro. De hecho, asumo el premio como un reconocimiento a un trabajo que se inició en 2021, cuando escribí el primer guion. La grabación del cortometraje la hicimos en 2023, dos años después, y ahora, un año más tarde, llega este premio. En muchas ocasiones parece que las cosas suceden de repente, pero detrás hay una labor de años, y reconocimientos como el de Lekeitio animan a seguir trabajando”, expresó la directora elgoibartarra.

Jone Arriola trabaja en el departamento de producción de Pausoka como guionista de la serie juvenil Kalaxka desde el pasado mes de febrero. Su llegada a Pausoka se produjo tras una estancia en Barcelona en la que, además de ampliar sus estudios de dirección y guion, tuvo la oportunidad de dar forma al que es su último trabajo hasta la fecha. Se trata de un nuevo cortometraje al que ha titulado Hor konpon, y que en estos momentos acaba de iniciar su fase de distribución. Se proyectó en la Euskal Zine Bilera de Lekeitio y próximamente se podrá volver a ver tanto en Zinebi como en la Feria de Durango.

El eje sobre el que pivota 'Dena asmatuta dago' es el sentido de las cosas a partir del nombre que se les da, tomando como punto de partida la relación entre dos amigos. En este caso, las protagonistas del cortometraje que Arriola ha grabado en Barcelona son dos chicas cuya realidad personal va más allá de la primera imagen de ellas que tiene el espectador al empezar a ver la película. “En la primera mitad las presentamos como dos ladronas desvergonzadas, dos chicas desorientadas que viven en un ambiente marginal. Esa primera parte está llena de acción pero, llegado a un punto del relato, nos detenemos para mostrar la realidad de las dos jóvenes y dar paso a una reflexión sobre el cambio, así como sobre la necesidad de cambiar, los pasos a dar y las decisiones a las que nos vemos abocados para hacerlo posible”, comentó Arriola en un adelanto de lo que ofrece su último trabajo.