La diva del soul blues, Trudy Lynn, encabeza el cartel de este año del festival que hasta este domingo regará Arrasate con los ritmos y sonidos de uno de los géneros más influyentes de la historia de la música. La veterana cantante y compositora estadounidense –actuará mañana con los Travellin’s Brothers en la Herriko plaza (22.30 horas)– es la única representante internacional de una cita que puede presumir también de reunir el talento y la calidad de artistas de “kilómetro cero”, y que en su plantel incluye nombres como el de Mónica Durán.

Nacida en Arrasate, esta farmacéutica de profesión empezó a forjar su vínculo con la música desde niña. Cuenta que solía cantar entre las cuatro paredes de su habitación, y que aprendió a tocar la guitarra a las órdenes de la profesora arrasatearra Jesusi Etxebarria. Su pasión por la música fue creciendo.

Con cinco años Mónica cambió su residencia a Aretxabaleta y después la familia se mudó a Badajoz. A los 14 regresó a su localidad natal donde empezó a coquetear más en serio con las notas musicales, y cuando cumplió la mayoría de edad se trasladó a Gasteiz, ciudad en la que vive actualmente, para realizar sus estudios.

“A pesar de mi vida itinerante, Arrasate sigue siendo mi pueblo. Cada vez que voy –y lo hace con una periodicidad casi semanal– tengo la sensación de estar volviendo a casa”, relata Durán. Poco después de su llegada a la capital alavesa, y tras responder a un anuncio, ingresó en la banda gasteiztarra Kubers, asumiendo el papel de vocalista y compositora, con la que ruló por numerosos escenarios, bebiendo del pop y el rock.

Con la experiencia acumulada en conciertos, varios discos grabados y animada por su “gran amigo” Fran Serrano, en 2020, en plena pandemia, decidió dar un paso más allá en su formación musical, logrando acceder al Conservatorio Superior de Música de Navarra, en cuyas aulas encara la etapa final de los estudios superiores de interpretación como cantante de jazz; un género que, según afirma, le ha “atrapado de lleno”.

Quinteto para el domingo

“Lo bueno y divertido del jazz es que te permite moverte de muchas formas y en distintos formatos”, destaca Durán. Al Arrasate Blues acude con un quinteto, que junto a ella integran también los músicos Fran Serrano (contrabajo), Richie Salvador (piano), Martí Elías (batería) y Andoni Aizpuru (saxo alto). El domingo, en el escenario de Arbolapeta –junto al bar Ezkiña, a las 13.00 horas– interpretarán, con un sello muy personal, los grandes standards del jazz, “tanto clásicos como contemporáneos, haciendo un guiño, por supuesto, al blues, gran protagonista durante estos días”, avanza está polifacética cantante de 34 años, que está viendo como el esfuerzo de compaginar el trabajo con los estudios musicales va recogiendo sus frutos. “Desde hace un par de años toco de un modo más profesionalizado”, se congratula la artista arrasatearra, que a las puertas de finalizar la carrera ya barrunta un proyecto “con mayor proyección”.

Al concierto de pasado mañana llega “con muchas ganas”. La familia, sus amigos de siempre… le van a ver en un “contexto diferente”. “Es algo bonito y especial”, reconoce.

Sobre el Arrasate Blues asegura estar “encantada y muy agradecida” de formar parte del cartel de este festival, que en su todavía corto recorrido “va cogiendo tamaño”. De la organización, que tiene al frente a la asociación de comerciantes Ibai-Arte, aplaude su interés y firme apuesta por “los artistas locales y la presencia femenina”. Toda la información de la quinta edición de este evento musical puede consultarse en www.arrasateblues.com.