Goierri sigue apostando firmemente por el sector industrial, ya que continúa siendo el principal motor económico y de riqueza del valle. El 50% del empleo de la comarca (algo más de 12.000 empleos) está en el sector industrial. No obstante, se enfrenta a continuos cambios y complicaciones, crisis y adaptaciones. Iker Galparsoro, director general de Goieki, la agencia de desarrollo comarcal de Goierri, ve en la inmigración, las mujeres, la innovación y la colaboración, la clave para el empoderamiento futuro de las pymes, y el de la comarca en general.

¿Qué balance haría del año 2022?

Ha sido un año de reflexión en muchos sentidos. Después de la crisis del coronavirus hicimos un análisis para conocer cuál era la situación de los diferentes sectores de la comarca, a nivel de empresas. Fruto de ese primer diagnóstico se pusieron en marcha una serie de actuaciones, en el marco del programa Berrabiarazi, que fueron financiadas por los 18 Ayuntamientos de Goierri. Es por ello que 2022 ha sido un año en el que, después de dar inicio a todas esas actuaciones, hemos valorado cuál es la situación en la que están las empresas, así como los datos socioeconómicos generales de la comarca. El dato es importante, pero lo primordial es prestar atención a la tendencia.

¿Y cuál es la tendencia que ha adoptado la comarca en los últimos años?

La tendencia demográfica que veníamos registrando desde antes del 2000 se ha roto en los años de pandemia, y es que, entre 2020 y 2022 la población se ha visto reducida en 436 habitantes. Esperamos, que una vez superada la pandemia, volvamos a recuperar la tendencia ascendente de años precedentes. Actualmente, Goierri cuenta con cerca de 44 mil habitantes. Sin embargo, tenemos que destacar, que en comparación con Gipuzkoa y Euskadi, existe una mayor población joven en la comarca, lo que es muy positivo para el futuro de nuestra economía. No obstante, el envejecimiento de la población continúa siendo una realidad. Es ahí donde se nos plantean retos de cara a futuro. Es uno de los temas más repetidos en las reflexiones comarcales, sobre todo, el relacionado con el cuidado de las personas mayores. Asimismo, huelga decir que la tasa de personas extranjeras es muy alta en el valle; estamos en un 13%, mientras que Gipuzkoa y Euskadi se sitúa en el 8%.

¿Es beneficiosa la migración para la comarca?

De aquí en adelante las empresas y el mercado laboral van a necesitar personal, ya que con los colectivos que actualmente existen en cada cohorte de edad no va a ser suficiente para dar respuesta a las necesidades laborales que se plantean. La migración tiene sus complicaciones, pero si se gestiona correctamente, es beneficiosa para la comarca. La alta tasa de personas extranjeras nos dice que Goierri tiene oferta de empleo, y es que, normalmente, los movimientos migratorios se dan por trabajo. El 53% de las personas migrantes que hay en la comarca provienen de países de la Unión Europea, sobre todo, de Rumania; el 22% de África, el 15% de América y un 8% de Asia. Ordizia es el municipio con mayor tasa de población extranjera (20%), seguida por Zaldibia (15%) y Beasain (14%).

¿Cómo está siendo la integración de las personas extranjeras en el mercado laboral?

El nivel de estudios de la mayoría de las personas que están aterrizando en la comarca es bajo. Eso hace que tengan dificultades para incorporarse al mercado laboral. En ese sentido estamos articulando diferentes proyectos, tanto de formación como de acompañamiento. Destaca el programa ElkarEkin Lanean, financiado por la Diputación Foral de Gipuzkoa y desarrollado conjuntamente con diferentes agentes de la comarca, como Caritas, Sarea, Goierri Eskola, Prospektiker y el propio Goieki.

Goierri es una comarca con un poderoso sector industrial. Al tratarse de un sector tradicionalmente masculino, ¿es la tasa de ocupación desigual entre hombres y mujeres?

Tenemos una tasa de ocupación muy favorable pero desigual en cuanto a hombres y mujeres. Siempre ha habido mayor brecha de género en Goierri, que en Gipuzkoa y Euskadi. Tenemos más hombres que mujeres trabajando en el sector industrial y eso hace que haya ese desequilibrio, lo que se traduce también en el desempleo. Tenemos poca tasa de paro; en estos momentos en torno a un 7%, inferior a la que hay en Gipuzkoa y Euskadi, pero la diferencia entre mujeres y hombres es muy alta. Existe aproximadamente un 10% de desempleo en mujeres, mientras que en hombres la tasa es del 5%. Es uno de los restos que estamos analizando y trabajando. 

“Intentaremos sensibilizar e informar a las mujeres estudiantes sobre las oportunidades de trabajo que les ofrece el sector industrial”

¿Cómo promover la participación de las mujeres en la industria?

A las jóvenes que aún no han tomado decisiones en cuanto a sus estudios, intentaremos sensibilizarles e informarles sobre las oportunidades que les ofrece el sector industrial. Sería interesante que contemplasen la posibilidad de estudiar las famosas vocaciones STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas). Es un proyecto que pondremos en marcha en los próximos meses, de la mano de las empresas y los centros educativos del valle.

“Los datos demográficos nos dicen que en pocos años vamos a tener déficit de personas trabajadoras. El relevo no está garantizado”

¿Cuál es el principal reto al que se enfrenta Goierri?

Los datos demográficos nos dicen que en pocos años vamos a tener déficit de personas trabajadoras. Si no cambian mucho las cosas y la gente se sigue jubilando con 65 años, el relevo de todos esos trabajadores no está garantizado. Por consiguiente, actualmente estamos haciendo un análisis por sectores con las empresas más importantes de la comarca, con el objetivo de recabar información concreta de cuáles son las necesidades reales que tienen hoy en día, y cuáles serán las de los próximos años: puestos de trabajo, perfiles profesionales, etc. De esta manera, en el caso de que se prevea que vayan a generar nuevos puestos de trabajo, se trabajará de forma conjunta en la creación de proyectos para formar y retener talento, así como para atraer talento del exterior.

Otro de los retos es el medioambiental.

Desde hace unos años conformamos un grupo de trabajo, junto a la mayoría de los Ayuntamientos y empresas del sector industrial, en el que establecimos un plan comarcal. Así, venimos ejecutando una serie de actuaciones en base a los objetivos que nos marcamos. Se han ido efectuando diferentes trabajos, y en estos momentos estamos muy centrados en temas energéticos, como la reducción de las emisiones CO2 y el consumo de energía, tanto en el sector público como en el privado. Asimismo, en breve se va a poner en marcha una oficina de información y asesoramiento de aspectos energéticos, dirigida a la ciudadanía y a los Consistorios, que se denominará Energía Bulegoa. En esta oficina de la energía una persona experta ofrecerá asesoramiento sobre el consumo de energía, la interpretación de una factura energética, la gestión de los bonos energéticos… Existe un compromiso por parte de los Ayuntamientos y de las empresas del sector en trabajar conjuntamente e intentar tomar decisiones consensuadas en esta transición ecológica.

“En Goierri tenemos una doble realidad; por un lado, están las grandes empresas, y por el otro, 250 pymes industriales”

En cuanto a las pequeñas y medianas empresas, ¿cómo empoderarlas?

Junto a la asociación empresarial Goierri Valley, conformada por 72 empresas de la comarca, se ha definido una estrategia común de cara al 2025 donde los principales retos son: empoderar a las pymes para asegurar su competitividad y sostenibilidad; atraer el talento; apoyar el emprendimiento; y potenciar la colaboración. En Goierri tenemos una doble realidad; por un lado, están las empresas tractoras que todos conocen, y por otro lado, tenemos 250 empresas industriales pequeñas y medianas muy dependientes de estas primeras. El 95% de las empresas que hay en Goierri cuentan con menos de diez trabajadores. Hay que ayudar a esas pymes acelerando la innovación y la digital ización, impulsando la diversificación y la expansión, y fomentando la cultura participativa. Ésto se tiene que llevar a cabo en todos los sectores, no sólo en el industrial.

‘Colaboración’ es uno de los términos más repetidos por usted.

Goierri es un territorio colaborador. Al final es la clave para caminar juntos hacia el futuro, trabajando con estrategias consensuadas entre todos, cada uno desde su punto de vista y desde su espacio, aportando valor a nuestro pequeño territorio. n