El Ayuntamiento de Astigarraga aprobó en el Pleno celebrado el martes por la tarde el presupuesto de 2023, el mayor de su historia. Si las cuentas de 2022 superaron por primera vez la cifra de los diez millones de euros, en 2023 se gestionarán once millones, tras una subida del 7%. A favor de la propuesta del equipo de gobierno, que incorporó varias de las peticiones recogidas en las reuniones de barrio, se posicionó solamente EH Bildu. PNV votó en contra y el edil del PSE no pudo acudir a la sesión.

En una comparecencia que ofreció este miércoles el concejal de EH Bildu, Andoni Gartzia, este explicó que el objetivo de los presupuestos municipales de 2023 es incrementar la protección social y apoyar a las familias más vulnerables. De hecho, el capítulo en servicios sociales aumentará casi un 29%, con respecto a este año. Por tanto, el Gobierno municipal considera que se trata de “unos presupuestos para hacer frente a los próximos meses y a los retos que se plantean”.

Gartzia señaló que el incremento en la cuantía del presupuesto se ha debido al aumento del Fondo Foral y a la previsión de la recaudación municipal en 2023, ya que calcula que percibirá en tasas e impuesto 140.000 euros más.

Sin embargo, el presupuesto de 2023 viene condicionado por dos factores: por un lado la subida de precios de la electricidad y el gas, que podría casi triplicar la factura actual del Ayuntamiento hasta alcanzar los 475.457 euros, y por otro lado, la financiación de la urbanización de Donostia Ibilbidea para cuya conclusión se destinarán 570.000 euros, el 65% del importe total de inversiones (830.000 euros).

De hecho, el próximo año el Consistorio aparcará las grandes obras, ya que este capítulo se reducirá en un 25,7%, ya que el equipo de gobierno apuesta por aumentar la protección social ante este contexto global tan incierto. No obstante, Gartzia, señaló este miércoles que una vez que se cierre el ejercicio de 2022 en primavera, se podrían incorporar nuevas inversiones gracias al remanente.

Así las cosas, por primera vez las políticas de servicios sociales superarán el millón de euros. De este modo, se destinarán 40.000 euros adicionales para atender la demanda existente en el servicio de asistencia domiciliaria; se incrementará la cuantía para las intervenciones familiares en 35.000 euros, hasta los 161.000 euros; se contratará una segunda trabajadora social (58.000 euros); se incrementarán las ayudas de emergencia en un 11% y se prevé una nueva convocatoria de subvenciones para apoyar a las familias vulnerables con menores y adolescentes a su cargo, propuesta desde el Foro Kontxa Etxeberria (40.000 euros).

Además, el departamento de Educación y Euskera también registrará un importante aumento, que contará con un 17% más que el presente ejercicio. También es importante destacar que para la reparación de caminos rurales se destinarán 150.000 euros y para la organización de actividades culturales, 130.000 euros a los que hay que sumar otros 15.000 euros del programa que se desarrollará durante el verano en el parque fluvial.

Se crearán nuevas partidas como el Servicio de Orientación Deportiva en colaboración con el ambulatorio o las ayudas para los grupos musicales para el pago del alquiler de los locales que usan para ensayar.

El resto de partidas, seguirán la estela de los años anteriores.