- Euskal Trenbide Sarea (ETS) reforzará el terreno bajo la playa para consolidarlo y poder retomar los trabajos de excavación del túnel de la pasante del Topo, que siguen paralizados en esta zona desde la aparición de un socavón en el sótano de una vivienda de la calle Zubieta a principios de junio. Se realizarán inyecciones de material en la zona kárstica desde el voladizo de La Concha, que se prolongarán durante tres meses.

Los preparativos de esta actuación arrancaron ayer y, una vez que esté completada, en noviembre, los distintos análisis y estudios que sigue haciendo ETS dictaminarán si la excavación continúa y cómo.

Concretamente, la intervención se hará entre la zona de las cabinas colectivas y los relojes. El objetivo es inyectar material en los huecos del terreno para consolidarlo y poder proseguir con la excavación del túnel por el que discurrirá la pasante del Topo.

Esta inyección de material es una actuación complementaria no prevista en un inicio y que se ha decidido tras la aparición del socavón en el número 8 de la calle Zubieta el pasado 5 de junio. En ese momento se decidió interrumpir los trabajos en ese túnel y proceder a estudios y análisis geológicos más detallados del terreno.

ETS explica que fueron las discontinuidades en el material de la roca donde se estaba excavando el túnel las que dejaron al descubierto una cavidad kárstica que generó filtraciones, arrastre de arena y el citado socavón.

En el comunicado difundido ayer, ETS explica que los trabajos de inyección de material han sido autorizados por la Dirección de Costas, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico. Esta semana los operarios delimitarán la zona de la intervención (la ocupación y afección serán progresivas) y trasladarán el kiosko, además de preparar los materiales y equipos necesarios. La intervención en la zona kárstica arrancará la semana que viene.

Fuentes de ETS incidieron ayer en que durante los trabajos no se obstaculizará el acceso a la playa ni al mar, ni tampoco a las cabinas colectivas ubicadas en el voladizo.

Por su parte, EH Bildu pidió ayer al alcalde, Eneko Goia, que convoque una Junta de Portavoces urgente para informar a los grupos municipales sobre esta actuación, sus impactos y el sobrecoste de la obra. La coalición denuncia "un nuevo capítulo de oscurantismo" en este proyecto y reclama "transparencia", además de preguntar si la excavación ha afectado al muro de costa.

La coalición añade que esta intervención "va a acarrear grandes afecciones", como "importantes molestias acústicas".

"Estamos hablando de dinero público. Un dinero que, en medio de una pandemia, debería estar invirtiéndose tanto en medidas sanitarias como en las medidas para hacer frente a la crisis económica derivada de la pandemia; no son tiempos de derrochar millones y millones de euros en proyectos faraónicos de escasa o nula rentabilidad social", afirma EH Bildu, que apunta que este tramo fue adjudicado por 53,2 millones de euros, un 26% menos que el precio de licitación previsto por ETS.

Tres días. El acceso al camino Antondegi desde Martutene se cerró ayer y permanecerá cortado durante tres días. El cierre se producirá entre las 8.30 y las 19.00 horas, según fuentes municipales, que explicaron que la causa es que se va a aplicar un producto antideslizante en el tramo inicial del camino con el objetivo de mejorar la seguridad de quienes transitan por él. El Ayuntamiento ha comunicado por carta a los vecinos de la zona el cierre durante estos tres días y también se han instalado paneles informativos en los accesos en los que se aconseja que el acceso se realice por el camino de Petritegi.

Las inyecciones en las cavidades kársticas se prolongarán durante tres meses, aunque no impedirán el acceso a la playa