donostia - El polideportivo provisional de Altza, ubicado en el antiguo Instituto de la Construcción (calle Casa Nao), abrirá sus puertas el próximo lunes con un total de 1.000 metros cuadrados en los que han acondicionado un gimnasio, una sala de ciclo indoor y otra sala para cursillos. En el exterior se habilitará, además, una pista polideportiva abierta a toda la ciudadanía. En principio, se trata de unas instalaciones provisionales para dar servicio al barrio hasta que se construya el nuevo polideportivo (a finales de 2020), pero el propio alcalde, Eneko Goia, confesó ayer que es partidario de “aprovechar las inversiones que se hacen” (de 1,5 millones en este caso), por lo que no se descarta que este equipamiento se mantenga también después. “Todo a su tiempo, tenemos margen”, declaró Goia.

De momento, el alcalde, que visitó ayer las nuevas instalaciones junto al concejal de Deportes, Martin Ibabe, y la gerente de Donostia Kirola, Leire Landa, insistió en que con este espacio “digno y adecuado” responden al compromiso adquirido con los altzatarras, que desde que se cerró el antiguo polideportivo, en noviembre de 2016, carecían de instalaciones deportivas en el barrio y tenían que desplazarse a las de Bidebieta o Intxaurrondo.

A partir del lunes dispondrán de un gimnasio de 300 metros cuadrados, en el que hay una zona aeróbica con bicicletas, cintas de correr y elípticas, así como una zona de fuerza con máquinas para trabajar distintos grupos musculares, una zona de entrenamiento funcional, otra de peso libre y otra de estiramientos. También hay una sala para cursillos deportivos y otra de ciclo indoor (con 23 bicicletas que estarán disponibles para el resto de usuarios cuando no haya cursillos). Entre el día 28 y el domingo 4 de febrero la entrada a la instalación será gratuita para que los altzatarras puedan conocer y probar las nuevas salas. También se ofrecerán varios cursillos gratuitos (para participar hay que apuntarse en la propia instalación o a través de Internet).

A partir del 5 de febrero, por otro lado, el polideportivo provisional empezará a funcionar con normalidad y acogerá, además, nuevos cursillos que se suman a la oferta actual de Donostia Kirola (de GAP, ciclo indoor, pilates tonificación o latinzumba). También se trasladarán al antiguo Instituto de la Construcción los cursos para mayores de 65 años que desde que se cerró el polideportivo se imparten en Larratxo.

En el barrio hay en la actualidad 3.750 abonados a Donostia Kirola a los que darán servicio estas instalaciones. Goia recordó que tras el cierre del polideportivo se dieron de baja alrededor de 300 personas. Todas ellas, así como el resto de altzatarras, podrán darse de alta en la Kirol Txartela sin tener que pagar la cuota de entrada si lo hacen a lo largo de 2019.

parking Frente a las instalaciones hay una zona de aparcamiento que permanecerá abierta todo el día para dar servicio tanto a los usuarios del polideportivo como a los vecinos de la zona.

Respecto a la posibilidad de que estas instalaciones se mantengan incluso después de que se construya el nuevo polideportivo de Altza, Goia comentó que para eso también tendrán que llegar a un acuerdo con Kutxa Fundazioa, titular del inmueble. De momento, les ha cedido el edificio, pero el Ayuntamiento ya le ha transmitido su deseo de adquirirlo en propiedad y vinculó ese acuerdo al proyecto de Aldakonea, donde también hay parcelas de Kutxa.