Arte reivindicativo en Donostia
La ‘Plastic Family’ del aquarium, elaborada con residuos plásticos recogidos en distintos puntos de la costa vasca, visibiliza en el Aquarium la crisis medioambiental que padecen los océanos
Cualquier visitante o donostiarra que acuda al Aquarium durante el mes de diciembre se percatará de que hay tres invitados poco usuales en el escaparate de su tienda. Se trata de la Plastic Family, concebida por el director creativo Sergio Penzo como una creación reinvindicativa, aunque también ha ganado el Concurso de Navidad de Escaparates en el apartado de Innovación. Los invitados de la vitrina son una familia hecha con desechos de plástico recogidos en las principales playas de la costa vasca. La iniciativa ha contado con la participación desinteresada de muchos “amigos y familiares” que se implicaron en los trabajos de recolección en el mes de agosto y que reunieron máquinas de afeitar, cepillos de dientes, tubos, aplicadores de tampones y otros muchos objetos de plástico que terminan en el mar.
El proyecto corrió a cargo del colectivo Panthalassa Blue Factory, que busca divulgar una educación que respete el océano. Se trata de una plataforma que tiene como objetivo concienciar a la población sobre la salud medioambiental del planeta. Reúne a artistas que sienten devoción por el mar y están dispuestos a ayudar en este trabajo de concienciación social.
Mediante la Plastic Family, el grupo pretende visibilizar la suma de residuos plásticos que terminan en el fondo del océano a diario. Impactado al conocer que alrededor de ocho millones de toneladas de este material acaban en el fondo del mar todos los años, Penzo decidió llevar a cabo una obra que ilustrase de manera artística la falta de solidaridad ambiental que afecta a la ciudadanía, creando el estereotipo de una familia, con un padre, una madre y un niño pequeño.
No obstante, Penzo no estuvo solo a la hora de crear las figuras de plástico, ya que contó con la ayuda de la diseñadora californiana Rebecca Kudela. Ninguno de los creadores dudó en materializar la idea de Panthalassa para concienciar a la sociedad acerca de “la importancia del reciclaje, la reutilización y la compra”.
La familia creada con basura no solo ha sido expuesta en Donostia. Con motivo del Día de la Limpieza Mundial, el 15 de septiembre, visitó Biarritz, lugar de residencia de Kudela. Por otro lado, el colectivo quiso rebasar fronteras y también llevó las esculturas de plástico al Parlamento Europeo, en Bruselas. Todavía no se ha concretado cuando retirarán las figuras del Aquarium, pero en Palabras de Penzo, esperan que estén al menos hasta después del día de Reyes.
Según los datos publicados por la ONU, actualmente el mundo produce 300 millones de toneladas de residuos plásticos al año. Dicha cifra equivale, prácticamente, al peso de la población humana al completo. Asimismo, cerca de la mitad de todo ese plástico es de un único uso. Panthalassa quiere reivindicar la necesidad de comprar materiales reutilizables e ir, progresivamente, minimizando la contaminación de los océanos.
Se estima que desde 1950 solamente el 9% del plástico fabricado (8,3 mil millones de toneladas) ha sido reciclado, con un 12% incinerado y el 79% restante acabando en vertederos, basureros y mares. Por otro lado, si prosigue la deriva que ha tomado esta crisis medioambiental, en el año 2050 los océanos podrían tener más plástico que peces.
activismo azul Panthalassa Blue Factory es un colectivo que aúna fotógrafos, escritores, directores, artistas, científicos y activistas de todo el mundo con intención de promover un discurso que ensalce la importancia del océano en la vida humana. El grupo analiza los mares desde distintos puntos de vista, mediante la elaboración de proyectos que reflejen esta crisis medioambiental. Han tratado temas como la pesca de arrastre sostenible, la sobrepesca que asola a los mares en la actualidad y han realizado un corto sobre el atún rojo.