El rumbo que tomarán los programas de empleo tienen su base en los datos que arroja la tasa de paro, que a finales de octubre (en breve se conocerá la de noviembre) se situó en 11,29%, o lo que es lo mismo, 1.178 desempleados de los cuales 682 son mujeres y 496 hombres. Si se hace una comparativa con el inicio del año, la tasa se ha reducido en 161 personas, y aunque esta tendencia a la baja se ha manifestado a lo largo de 2017, ha tenido un mayor reflejo en el colectivo masculino que en enero contaba con 119 empleados menos. En el caso de las mujeres esta evolución es menos alentadora y desde comienzos de año hasta ahora solo 27 han encontrado trabajo (de 709 ha disminuido a 682).
Por edades, el colectivo con un mayor número de parados es el que aglutina a arrasatearras de entre 55 y 59 años, seguido por poca diferencia del de 45 y 49 años, 40 y 44, y 30 y 34 años. En cuanto a los sectores, según la estadística mensual de empleo, el más afectado es el de servicios con 687 vecinos en situación de desempleo; por detrás está la industria con 235.
los programas Ante este escenario, el Ayuntamiento va a impulsar tres nuevas líneas de actuación en 2018. La primera de ellas se presenta bajo el paraguas del programa de activación para el empleo Gaztelan, que incidirá en la formación en tres áreas: montajes electromecánicos, producción agrícola y transformación de los alimentos. “Se trata de un plan especial dirigido a jóvenes desempleados que incluye un proceso de formación, orientación laboral, prácticas y posibles contratos”, detallaron esta semana el concejal de Empleo y la técnico de este Departamento, Juan Karlos Garitano y Marga Garmendia, respectivamente. El programa tiene un coste de 445.400 euros y podría ser financiado al 90% si se acepta la solicitud que el Consistorio ha presentado al Plan Operativo de Empleo Juvenil que coordina el Gobierno español.
La segunda línea estratégica pone el acento en el sector de la agricultura y el desarrollo de actividades en terreros rústicos de titularidad municipal. El Ayuntamiento está explorando esta alternativa con la colaboración de la Fundación Hazi del Gobierno Vasco y el Instituto Público de Investigación y Desarrollo Tecnológico, Neiker.
En tercer lugar se va a recuperar la convocatoria de ayudas encaminadas a favorecer la inserción laboral en empresas locales de jóvenes titulados. Pero la columna vertebral del empleo se fortalecerá con otros proyectos que ya están en marcha: las subvenciones a empresas para contratar a parados del municipio (en 2017 se han financiado diez contratos en nueve negocios), a la creación de nuevas actividades empresariales y la formación con apoyo económico a desempleados mayores de 25 años que hayan cursado estudios de FP, o no reglados de cualquier nivel y materia, además de la organización de cursos y la feria de Empleo Lanbai, entre otros.
Todas estas iniciativas tendrán respaldo económico una vez de que los presupuestos de 2018 reciban el visto bueno en el Pleno del día 5.