La Ertzaintza investiga una segunda agresión sexual ocurrida en los carnavales de Azpeitia, que al parecer está relacionada con el otro ataque por el que ha sido detenido un hombre, ha informado el Departamento vasco de Seguridad.
El Ayuntamiento ha suspendido todos los actos del carnaval y ha convocado una concentración de repulsa esta tarde.
El Departamento vasco de Seguridad ha confirmado la detención, en la noche del domingo, de un hombre como consecuencia de la investigación abierta tras recibir la denuncia de dos agresiones sexuales cometidas en los carnavales de Azpeitia.
El arrestado se encuentra en dependencias policiales mientras la Ertzaintza continúa la investigación para esclarecer las circunstancias de ambas agresiones sexuales.
A cuenta de este hecho, el Ayuntamiento ha hecho público un escrito titulado “El pueblo de Azpeitia no tolera la violencia machista” y con el que ha animado a la ciudadanía a participar en la concentración de repulsa que ha reunido a cientos de personas frente a la casa consistorial.
En el texto, el Ayuntamiento expresa su más enérgica condena contra las agresiones y aboga por dar pasos para erradicar ideas arraigadas en la mentalidad de muchos hombres que tienen como única finalidad lograr el sometimiento de la mujer. “La violencia contra las mujeres es un problema estructural que tiene como objetivo su control y sometimiento. Esta violencia no es fruto de actos aislados ni de hechos inexplicables. Los prejuicios sobre los géneros, tan arraigados en la sociedad, son los causantes de hechos que acarrean consecuencias graves y lamentables, y las agresiones sexuales son la expresión extrema de la violencia contra las mujeres. Para combatirlas es imprescindible promover valores de igualdad entre hombres y mujeres”.
La nota pone en valor la importancia de apoyar a las mujeres agredidas, creando un ambiente propicio que lleve a los potenciales agresores a entender que las mujeres no están solas. “Las mujeres agredidas deben sentirse acompañadas por todas y por todos. Apoyarlas es una responsabilidad conjunta que tiene que servir para hacer entender a los agresores que vamos a frenar el potencial de esta estrategia de difusión del miedo.