A la caza del hombre

La empresa municipal de autobuses de Donostia Dbus estudia la aplicación de nuevas fórmulas para atraer a los hombres al transporte público ya que, según el primer estudio elaborado por la compañía sobre el sexo y la edad de los usuarios, ha quedado demostrado que las mujeres son siete de cada diez viajeros mientras que los hombres, con mayor tasa de empleo, son solo tres. Es evidente, pues, que los varones son más proclives a usar el transporte privado, una realidad que tanto el área de Movilidad del Ayuntamiento como Dbus pretenden modificar.

La excepción son quienes usan la txartela para personas con discapacidad, donde los hombres son el 58%. En el resto son minoría, aunque aumentan su presencia en los autobuses tras la edad de jubilación.

La concejala de Movilidad, Pilar Arana, recuerda que dentro de pocos años, una vez puesta en marcha la variante del Topo, habrá nuevas opciones de transporte público dentro de la capital guipuzcoana. “Pero el objetivo municipal será siempre que el vehículo privado descienda todo lo posible y para eso hay que actuar”, dice la responsable de Movilidad. Asimismo, añade: “El estudio de Dbus es muy interesante porque dejar ver que hay unos nichos de nuevos usuarios y se puede saber a quién hay que convencer para que deje el coche y se suba al bus o al Topo”. “Dentro de tres o cuatro años tendremos que hacer un esfuerzo importante para que haya un trasvase del vehículo privado al transporte público, más allá de si a cada persona le viene mejor el bus o el Topo”, recalca la corporativa.

Por otra parte, Arana considera que, en general, “los hombres dan mayor importancia al coche” que las mujeres y apunta: “Aún no hemos conseguido que muchos usuarios de vehículo privado por lo menos conozcan qué línea les lleva a donde tienen que ir y creo que así igual se puede avanzar”.

con txartela mugi Por su parte, el director de la empresa municipal, Igor González, recuerda que el trabajo para conocer las características de los viajeros de Dbus se llevó a cabo a finales de 2018, con datos de los usuarios de 2017. Se han procesado exclusivamente las cifras de quienes usan la txartela Mugi, por lo que quedan excluidas las de quienes pagan billete individual o tarjeta turística, entre otras modalidades. El estudio, pues, tiene en cuenta 20 millones de viajes de los cerca de 29 que se registraron en el ejercicio 2017.

“Igual las campañas que hemos realizado hasta ahora han estado destinadas a nuestro público objetivo, pero quizás es el momento de pensar en aquellos que no son nuestros usuarios y en hacerles entender que el transporte público es una oferta competitiva respecto al transporte particular”, destaca González. Asimismo, señala que para atraer a los viajeros varones “hay que analizar los datos y ver qué estrategia es la más correcta, después de un proceso de análisis”.

González explica que el estudio llevado a cabo a finales del pasado año se tendrá que repetir de modo periódico en el futuro con el fin de ver la evolución de los usuarios. “Tenemos la foto fija y nos interesa estudiar los cambios que ya se empiezan a vislumbrar, que creo que van a favorecer el transporte púbico”, señala González. Asimismo, explica que parece que las nuevas generaciones empiezan a cambiar de tendencia. “Antes lo primero que se hacía al cumplir 18 años era sacar el carné para el coche y la moto cuanto antes. Ahora parece que ese patrón está cambiando porque a una de las grandes inversiones, como puede ser el coche, quizás no se le va a sacar el mismo rendimiento”, destaca González. “En ciudades como Donostia, con buen transporte público -añade-, hay que ver si merece la pena”. Según su vaticinio, “la foto fija de usuarios del autobús evolucionará hacia más usuarios hombres”.

por líneas La presencia de hombres y mujeres en distintas líneas tiene diferencias, según concreta el estudio, aunque siempre a favor de la mujer. La línea donde la desproporción es más acusada es la 33-Altza-Intxaurrondo-Berio, donde el número de viajes protagonizados por féminas supone el 72, 9% del total. Por contra, en el taxi-bus de Ulia es donde se producen menores diferencias y ellas copan el 58% de los viajes.

La mayor presencia de hombres al volante ha quedado en evidencia también en otros estudios impulsados por el Ayuntamiento. Por ejemplo, un 79% de las personas que acceden a trabajar al polígono de Zuatzu en coche procedentes de la propia Donostia lo hacen en coche a pesar de contar con transporte público. De ellas, el 54% son hombres y el 46%, mujeres.