Arrasate - Reordenar y optimizar el funcionamiento de los contenedores soterrados es el objetivo de la actuación que ha puesto en marcha el Ayuntamiento arrasatearra para poner freno a su costosa gestión. El concejal de Obras, Servicios, Mantenimiento y Barrios, Óscar García, destaca que estos equipos son propensos a sufrir averías y que en muchos casos “los tiempos de reparación no son inmediatos”. Reconoce, no obstante, que los contenedores subterráneos, en contra de los de superficie, conquistan los espacios urbanos y mejoran el aspecto estético de las calles, aunque advierte de que su mantenimiento es “increíblemente caro”.

El edil socialista cifra en hasta 18.000 euros los gastos en averías que han tenido que afrontarse, “y no solo una vez al año”, y cifra entre “60.000 y 80.000 euros” la inversión anual del mantenimiento de estos equipos destinados a depositar la basura. Explica, asimismo, que en la legislatura anterior, a raíz del debate que suscitó el sistema de recogida selectiva de residuos urbanos, el Consistorio comenzó a “suprimir” puntos soterrados. “Se dejaron de limpiar, aunque se hicieron tareas de mantenimiento para reparar averías; el mínimo para que continuaran en marcha”, añade.

seis puntos con deterioros Sin embargo, los actuales responsables municipales han querido reactivar el contrato con la Mancomunidad de Debagoiena para el mantenimiento de estos recipientes soterrados, y como paso previo, en las últimas semanas los operarios de la empresa Traeco, por encargo del Ayuntamiento, han llevado a cabo una limpieza integral de 33 puntos de contenedores subterráneos que seguían operativos en el municipio. De ellos, según detalla García, un total de 27 han eliminado su suciedad y se han puesto a punto para su uso; los restantes seis presentan diversos deterioros y están localizados en las calles Txaeta, Aprendices y Garibai etorbidea (frente a la sucursal del BBVA). En algunos casos, los soterrados han sido reemplazados por contenedores de superficie.

Además, las tareas de limpieza integral se completarán con un estudio, ya en marcha, “pormenorizado e individualizado de cada zona”, precisa García, al tiempo que adelanta que algunos de estos contenedores que almacenan los residuos bajo tierra “se dejarán en el camino”, porque de lo que se trata es de “ver cuáles merece la pena mantener o, por el contrario, hay que clausurar”.

El concejal de Obras y Servicios cree que en este chequeo se “salvarán” los dispositivos subterráneos distribuidos en la zona centro, donde la instalación de los contenedores en superficie resulta más complicada por cuestiones de estructura urbana. Asimismo, insiste en que en la colocación de estos últimos se tienen en cuenta la “viabilidad técnica” (en lo referente a los camiones de recogida de residuos) y la “seguridad vial”. - A.D.