una de las operaciones más delicadas de la obra del campo de fútbol de Anoeta quedó cumplimentada ayer sin contratiempos, dos días después de la fecha inicialmente fijada, a causa de la lluvia y de un problema técnico en una de las grúas que debían tomar parte en la operación. A las 18.00 horas, la gran cercha metálica, cuyas piezas habían sido ensambladas frente al estadio de Anoeta en los últimos días, quedó posada en el fondo norte, sobre dos de los ocho grandes pilares que han sido añadidos al estadio para sostener las estructuras sobre las que se colocará la cubierta del futuro Anoeta. Con el fin de la operación terminaron los desvíos preventivos de tráfico.
La cercha, de 150 metros de longitud y un peso de 400 toneladas comenzó a elevarse del suelo muy suavemente hacia las 12.00 horas, aunque no fue hasta 40 minutos después cuando el abundante público, principalmente masculino, que se había acercado a observar la operación, pudo comprobar cómo la gran estructura se elevaba del suelo y se iba acercando hasta el edificio salvando con cuidado las “costillas” que sobresalen de las fachadas. Antes, cada uno de los extremos de la estructura había sido sujetado con dos argollas a la grúa correspondiente.
Algunos de los curiosos que se habían acercado al lugar desde las 11.00 horas, tras conocer que la operación se desarrollaría en la jornada de ayer, se impacientaban ante el aparente parón del comienzo. “No sé a qué están esperando”, se quejaba uno de los presentes entre el público que, sin embargo, anunciaba que esperaría lo que hiciese falta porque “no se ve un armatoste así todos los días”.
Efectivamente, la primera de las cuatro cerchas que quedarán posadas sobre los nuevos pilares del estadio es un gran mecano de sección triangular, de ocho metros de ancho y diez de alto, que tuvo que ser movido al milímetro. Además de los expertos operarios de las grúas, que tuvieron que sincronizarse para no cometer equivocaciones, un grupo de topógrafos situados sobre el volcán ornamental de la rotonda de Anoeta lanzaban rayos de luz para que la trayectoria de la mole metálica no se desviase y se pudiese así colocar con exactitud en su lugar.
Varias decenas de trabajadores de las numerosas empresas de construcción e ingeniería que toman parte en la obra del estadio contemplaron también en un contenido silencio el izado de la gran cercha.
La estructura ha sido elaborada en acero de alta resistencia por la firma Horta Colsada, entre sus factorías de Madrid y Galicia. La empresa está especializada en la creación de estructuras metálicas y ha participado también en las del estadio del Atlético de Madrid y en el velódromo de Marsella, entre otros.
La colocación del entramado del fondo norte del estadio tendrá una repetición la próxima semana en el fondo sur, donde ya se puede contemplar en el suelo la cercha de este punto. Ambas estructuras, aunque corresponden a los lados más cortos del estadio, serán, sin embargo, más largas que las de los laterales, ya que estas no se instalarán en un único bloque. Cada una de ellas se dividirá en tres partes. La del este se instalará a finales de junio y la del oeste, en la primera semana de julio, según el plan previsto.