Es lamentable e inconcebible que en este inicio de los carnavales de Tolosa, nos hayamos despertado con una campaña indecente de pintadas de todo tipo en nuestras calles de Tolosa.

Siempre he pensado que los carnavales de Tolosa además del ingenio y el humor que caracterizan sus parodias, dan pie para la crítica y la sátira sobre temas de actualidad, y para la denuncia de situaciones injustas, pero siempre desde el respeto. Parece que hay personas que no saben divertirse y disfrutar de estas fechas sin empañarnos a los demás estas fiestas tan entrañables. Por cierto, actos que se desarrollan desde el amedrentamiento, imposición y nocturnidad.

Estos comportamientos vandálicos suponen un coste al erario público y por ellos se pedirán responsabilidades. Pero, en el fondo, también me preocupa, más si cabe, que interpelen en sus mensajes e indiquen con las pintadas en fachadas a determinado tipo de actividades que se desarrollan en nuestro municipio con poco esfuerzo y que aportan un valor incalculable en cuanto a desarrollo económico y social y son fiel reflejo del carácter y la idiosincrasia de Tolosa. Tolosa no sería lo que es sin la actividad de nuestro comercio.

Mediante estas líneas quiero expresar mi más absoluta repulsa por todas las pintadas que se han realizado. Estoy a favor de la libertad de expresión y del respeto a la pluralidad. Pero todo ello desde el respeto, la libertad de una persona tiene el límite del respeto a la libertad de otra. Se han dado situaciones en las cuales los actores de estas pintadas han increpado a las personas trabajadoras que protestaban por dicha acción. No tiene calificativo. Y dicho sea de paso, no es la primera vez que ocurre, el año pasado vivimos una situación similar. Esperemos que no se convierta en costumbre, ahí estará el Ayuntamiento para intentar impedirlo.

Este Gobierno Municipal se solidariza con los afectados por estas acciones y quiere mostrarles todo su apoyo. El comercio precisa del apoyo de todos y todas, incluso de los que realizan estos actos vandálicos. Cada día que levantan la persiana del establecimiento nos prestan un servicio que todos agradecemos, ayudémosles visitando sus comercios, y no agrediéndolos. Gora Iñauteriak!