zumarraga - El zumarragarra Juan Mari Gabilondo conoce los montes de Euskal Herria como pocos. Desde 1949 la Federación Vasca de Montaña anima a los montañeros a conocer el país mediante el Concurso de Cien Montes y Gabilondo ha completado siete centenares: ha subido 700 montes de la lista que maneja la Federación. Ya no puede hacer añadir otro centenar completo, pero su objetivo ahora es completar todo el listado.

Los montañeros tienen entre cinco y diez años para completar cada centenar. Solo pueden subir un monte cada día. Una vez conseguido el objetivo reciben un diploma, además de entrar en la Hermandad de los Centenarios. Gabilondo entró en esta hermandad en 1975.

En el catálogo hay unos 900 montes, pero en él tienen cabida también los principales montes de los Pirineos y de España. En cada centenar tiene que haber por lo menos 75 montes de Euskal Herria. “Yo ya no encontraría 75 montes sin repetir, por lo que me planto. Eso sí, seguiré subiendo los montes del catálogo, hasta completar la lista. Me quedan unos 30 por subir. En unos doce de ellos ya he estado, pero ese mismo día había subido algún otro monte”.

Gabilondo es el presidente de la sociedad de montaña Ostadar. Pertenece a este club desde su fundación y anteriormente fue miembro de Oargi. En las salidas montañeras de estos clubes, ha subido otros muchos montes de Euskal Herria que no están en el catálogo.

No habrá muchos que hayan subido tantos montes. “En nuestra zona no hay tanta afición a los centenarios. En Bizkaia, sí. Esto es un círculo que se va agrandando, pues empiezas con los más cercanos y acabas haciendo montes que están a 150 kilómetros. Al principio no tenía coche y hay que recordar que solo se puede subir un monte cada día”.

Aizkorri, el favorito Opina que el montañismo es una forma muy buena de conocer nuestro país y sus gentes. “Hay muchos montes bonitos, pero depende de la fecha en la que vayas. En invierno tienes la nieve, en otoño los colores... Mi monte más querido es Aizkorri, con su sierra. Y de las cuatro estaciones, me quedo con el invierno. Aizkorri en invierno es una maravilla. Es un lugar muy especial para nosotros: era el gran monte al que podíamos ir cuando no teníamos coche, gracias al tren. Urbia y Aizkorri eran la salida natural de los de Zumarraga. Un monte de categoría y accesible”.

Otros, aunque más bajos, son menos accesibles. “Toda la vida me he guiado por la brújula y el plano. El gran problema de algunos montes es que tienen mucha vegetación. Algunas veces tienes que dar un rodeo para llegar. Uno de los últimos lugares en el que he tenido dificultades para orientarme es en la sierra de Zarakieta”.

El zumarragarra ha hecho muchos amigos. “Lo más recomendable suele ser dejar el coche en un pueblo pequeño y preguntar a algún vecino. Cuando vuelves, te están esperando”.

Gabilondo no ha recorrido tan solo las montañas de Euskal Herria. También ha pisado las cumbres más altas de Pirineos, Alpes, Noruega, Grecia, Alemania, Bulgaria, las antiguas Checoslovaquia y Yugoslavia...

Alumno aventajado Además, trata de inocular el veneno del montañismo a todos los que participan en las salidas de Ostadar y a los que acuden a la proyección que ofrece todos los años en la Semana de la Montaña de este club. Incluso tiene un alumno aventajado que será su sucesor: su sobrino Iñigo Lete. Este año alcanzará el quinto centenario. “Iñigo tiene más facilidades, pues empezó conmigo siendo un chaval y hoy en día hay más medios. Si quiere, me superará”. Orgullo de tío montañero.