Victoria agridulce para el campeón

La vida del zarauztarra Josu Azpeitia Beristain ha estado ligada desde siempre al mundo de la caza y el tiro. Comenzó a practicar el tiro con apenas 11 años, y desde entonces se ha vuelto una manera de vida. Tanto es así que compite desde que tenía unos 13 años y desde entonces ha ganado varios campeonatos de Euskadi de tiro al plato e incluso quedó tercero en el campeonato de Europa hace tres años.

Y ahora, también puede presumir de ser campeón de España de tiro al plato, ya que el pasado fin de semana se proclamó ganador del Campeonato de España, en la modalidad de mini foso, con 74 platos de 75, en la localidad navarra de Valdorba. Así, se hizo con el premio de una medalla, un trofeo y un premio metálico de 500 euros.

Según cuenta el tirador zarauztarra, se encuentra contento tras ganar la prueba, pero reconoce que aunque está teniendo un buen nivel en esta temporada no esperaba hacerse con el campeonato. “He solido quedar en segundo y tercer puesto en esta prueba pero es bastante difícil ganar porque suele haber muy buenos tiradores, y aunque fui a darlo todo no me esperaba ganar”, señala Azpeitia. En la prueba participaron unos 80 tiradores.

No conforme con este último título, el zarauztarra está participando este fin de semana en otra Copa de España en Madrid, con la participación de cerca de 200 tiradores, y según cuenta Azpeitia, “el nivel de los participantes suele ser muy alto”.

Tal y como relata Josu, la afición al tiro le viene de familia, y es que su padre es un gran aficionado desde siempre y se lo ha transmitido a sus dos hijos desde bien pequeños. “Mi hermano y yo comenzamos con unos 11 años, y para los 13 años ya estábamos metidos en el mundo de la competición. Así, con 16 años conseguí mi primer campeonato de Euskadi y así he seguido, de campeonato en campeonato, hasta hoy en día”, relata el zarauztarra.

Deporte abandonado

No obstante, lamenta que el tiro al plato no es un deporte nada reconocido y que tampoco se sienten apoyados por las instituciones. “Ganas un campeonato de Euskadi o del Estado, y no te dan ninguna facilidad en la federación, y por parte del ayuntamiento tampoco hay ningún tipo de reconocimiento. Es un deporte totalmente abandonado y no contamos con ningún tipo de ayuda”, indica. En este sentido, recuerda que hace tres años ganó el Campeonato de España por equipos en la modalidad de foso olímpico junto con su hermano y el bilbaino Jon Bilbao, algo que es “realmente muy difícil”. “El equipo que suele ir a las Olimpiadas es el que gana normalmente esa competición y el ganar a un equipo que vive de dedicarse al tiro al plato fue realmente increíble. Pero, lamentablemente, nadie lo tuvo en cuenta. En ese sentido, sentimos mucha pena, porque no tuvimos ningún reconocimiento”, reconoce el campeón.