Donostia - El refuerzo de redes metálicas colocado en parte de la ladera de Urgull el pasado verano, cerca de la Sociedad Fotográfica del Paseo Nuevo, no ha sido suficiente para retener los desprendimientos de piedra en este punto, lo que obligará a mantener clausurada esta zona del paseo marítimo hasta el próximo mes de mayo, con el fin de acometer nuevos trabajos que eviten de modo efectivo la caída de piedras.

Así lo anunció ayer la concejala de Servicios Urbanos de Donostia, Nora Galparsoro, quien recordó que este punto se encuentra cerrado al público desde el pasado 25 de febrero, cuando una parte de la red de sujeción colocada en la zona más alta de la ladera cedió por el peso de las piedras despegadas del monte y un total de 1,8 metros cúbicos de material cayeron al paseo, sin provocar daños a nadie. En concreto, se desprendieron tres bloques grandes, que sumaron un metro cúbico en total, más 0,8 metros cúbicos de piedrecillas que quedaron esparcidas. “El volumen extraordinario de la caída, así como el gran número de bloques desprendidos y retenidos en la malla tienen probablemente su origen en las lluvias extraordinarias sufridas este invierno”, asegura el informe de urgencia encargado a la empresa Euroestudios, la misma que aconsejó los trabajos ejecutados en los últimos tiempos en la ladera.

En noviembre de 2012, una piedra de un metro cúbico cayó a la carretera cerca de la Sociedad Fotográfica, sin que afectase a nadie. Sin embargo, en agosto de 2013, un joven donostiarra perdió la vida cuando fue alcanzado por otro desprendimiento, precisamente en la zona que estaba siendo objeto de trabajos para sujetar las piedras de la ladera de Urgull.

Tras el último desprendimiento de finales de febrero, el Consistorio realizó una inspección el pasado 3 de marzo y encargó un nuevo análisis de urgencia a Euroestudios. En vista de la situación, los especialistas han recomendado reforzar más el acantilado, en la zona más alta de la ladera, con el fin de que las protecciones puedan soportar mayores empujes. Para ello, los especialistas calculan que la membrana que se coloque debe tener una capacidad de 22.000 kilos por metro cuadrado.

Esta red metálica irá adosada a la zona más alta del acantilado mediante bulones de 32 milímetros de diámetro, con cables entre ellos y anclajes anticorrosión, para conseguir una mayor seguridad. Su superficie abarcará unos 2.000 metros cuadrados.

Según el diagnóstico del desprendimiento que ha roto la malla de protección, ésta ha fallado “al tener que soportar un peso de 46,8 KN/m (kilonewton por metro), muy próximo a la capacidad de tracción de la malla de 53KN/m”. Por este motivo, proponen colocar un refuerzo con mayor capacidad de tracción.

La concejala de Proyectos y Obras anunció que los trabajos para sujetar este punto del acantilado de Urgull darán comienzo en Semana Santa y durarán cuatro semanas, con un coste de 95.000 euros. Asimismo, señaló que la zona quedará cerrada hasta la finalización de las obras y volverá a abrirse al público en el mes de mayo.

En los últimos tiempos, el Ayuntamiento ha tenido que hacer frente a numerosos desprendimientos en la ciudad. Solo los de Urgull han costado 1,7 millones en los últimos años.

Urgull. Las laderas de Urgull han sufrido numerosos desprendimientos en los últimos años. Desde finales de 2012, cuando cayó un gran bloque sobre el Paseo Nuevo sin provocar daños, el Consistorio de Donostia ha tenido que gastar 1,7 millones de euros en sujetar las piedras de distintas zonas del monte.

Informes. La sujeción de las laderas se produjo con distintas técnicas, tras un informe de la empresa Euroestudios que consideraba que no era “evidente” que existiera riesgo de “otra caída de similares dimensiones”. xxxxxx