Antiguamente en Hernani existió una calle llamada Andre kalea, que significa calle de las mujeres, la actual Kardaberaz kalea. Según consta en la documentación que se conserva en el archivo municipal, en 1896 la Diputación Foral de Gipuzkoa recomendó a los ayuntamientos la rotulación doble de las calles en euskera y castellano.
Siguiendo esta recomendación, el Ayuntamiento de Hernani acordó adoptar dos denominaciones oficiales para esta calle: Andre-kalia en euskera y Urumea en castellano. Al parecer, en el año 1900 se acordó llamarla Urumea y, finalmente, en 1927 pasó a denominarse Padre Cardaveraz, que más tarde, en 1988, se sustituyó por la forma en euskera (Kardaberaz kalea).
Así las cosas, el Consejo de Igualdad de Hernani lleva unos años trabajando el tema de género y espacio. En esa línea de trabajo se entiende la demanda que han llevado al Consistorio para que Kardaberaz vuelva a llamarse Andre kalea.
Siguiendo con ese requerimiento ha organizado una mesa redonda para esta misma tarde, a las 19.00 horas, en Biteri kultur etxea titulada Andrekale: la presencia de las mujeres en los símbolos del pueblo.
Participarán en este foro la investigadora e historiadora Mertxe Tranche y Miren Lantz en nombre de Irungo Bilgune Feminista.
Origen Existen diferentes teorías en torno a la denominación de Andrekale. Jesús Mari Gómez, técnico del archivo municipal, escribió en 2008: "Consultada la documentación conservada en el archivo municipal, deducimos que Andrekalea o Andre-Kalea era una denominación popular extendida entre la población por las singularidades socioculturales que se daban en la misma. Parece ser, así transmitido y recogido oralmente entre la población, era la calle en que llevaban a cabo su vida social las mujeres residentes del cuerpo de la villa".
Por otro lado, Nekane Idarreta, maestra de la ikastola Langile, y Estitxu Eizagirre, periodista y directora de la revista Argia, expusieron diversas teorías sobre este nombre en su artículo publicado en el Anuario de Hernani del año 2004:
Una primera creencia señala que Kale Nagusia era la calle de las tiendas elegantes, frecuentada por personas elegantemente vestidas; y Andre kalea era la calle en la que las mujeres trabajaban. Se menciona, además, que la mayoría de las casas de Hernani se estructuraban en torno a un doble portal, lo que avala la teoría de que la zona pública y la privada se encontraban separadas, y añaden que antiguamente las mujeres tenían la costumbre de bajar las sillas de casa y reunirse en la calle para trabajar mientras conversaban. En Andre kalea las mujeres solían también jugar a las cartas, costumbre recuperada actualmente durante las fiestas del Kaxko.
Otra teoría sostiene que en Andre kalea vivían numerosas lavanderas y que la gente pudiente les llevaba la ropa para que la lavaran en el lavadero de Leoka.
Según una tercera hipótesis, pudiera ser que hubiera una organización de las calles conforme al género, en base a la cual Kale Nagusia sería la calle de los hombres, Andre kalea la de las mujeres y Atzieta la de los animales.
No obstante, "en la documentación escrita no se han encontrado pistas que determinen el origen de esta denominación, por lo que únicamente contamos con la transmisión oral, testimonios que, a medida que va pasando el tiempo, son cada vez más escasos", señalan desde el Consejo de Igualdad.
"En cualquier caso, sea cual sea el origen del nombre de la calle, lo que es evidente es que es un reflejo de la sociedad de su tiempo. Está presente en la memoria social, como lo demuestra el hecho de que en la actualidad muchas personas mayores continúan refiriéndose a esta calle como Andre kalea, como testigo de la presencia que las mujeres tuvieron antaño en ella, bien jugando a las cartas, bien trabajando o en la tarea que fuera", aseguran.
"A través del propio nombre se da a conocer y se evidencia la historia de las mujeres, reconociendo el peso que tuvieron en la época y ofreciéndonos a nosotras, que constituimos la mitad de la población, al menos un lugar en un espacio concreto de nuestro municipio, pues si miramos alrededor parece que ni siquiera hayamos existido", manifiestan.
Teniendo en cuenta todo lo expuesto, el Consejo de Igualdad considera indispensable la recuperación de la denominación Andre kalea y solicita al Ayuntamiento de Hernani que aborde la recuperación de dicho término y admita la falta de presencia de las mujeres en la historia oficial.
De este modo se reconocerá al colectivo de mujeres y la presencia que las féminas han tenido en el municipio de Hernani, ofreciéndoles el lugar que merecen. Así las cosas, le piden al Consistorio que adopte las medidas necesarias para hacer visibles a las mujeres y como primer paso le sugieren sustituir la denominación de Kardaberaz kalea por Andre kalea.
En este sentido, desde el Consejo de Igualdad recuerdan que el nombre de Andre kalea ya estaba establecido tanto oficialmente como socialmente, y se mantiene aún vivo en la memoria social de la población. "Si bien la denominación Andre kalea no elogia la figura de una mujer en concreto, reconoce al colectivo de mujeres, resarciendo de alguna manera la injusticia cometida hasta la fecha; las mujeres y los sectores marginales no hemos ocupado un lugar en la historia oficial, por lo que no podemos basarnos en la relevancia histórica", exponen.
En opinión de este organismo, el cambio de nombre sería "un importante primer paso para apartar a las mujeres del olvido y proporcionarles el reconocimiento que merecen, con el fin de ir dando los pasos necesarios para completar la historia y la memoria de la población hernaniarra". "Las mujeres, aunque ya existimos en la memoria social, necesitamos estar presentes también en la memoria oficial, y qué mejor manera para ello que recuperar el nombre de Andre kalea. Es cuestión de voluntad política", declaran desde el Consejo.
Otras Iniciativas Conscientes de la escasez de calles con nombres femeninos, algunos municipios ya han puesto en marcha diferentes iniciativas. Por ejemplo, el colectivo Irungo Bilgune Feminista, a la vista de que el callejero de Irun solo contenía dos nombres de mujer, propuso seis nuevos para designar futuras calles de la ciudad, con el objeto de elogiar la figura de las mujeres más importantes de la localidad y las profesiones tradicionalmente desempeñadas por mujeres. Trabajos similares se han llevado a cabo en Donostia o en Arrasate.
Solo seis. Hernani cuenta en el callejero con 80 calles y plazas de las cuales seis tienen nombre de mujer o femenino, en todos los casos relacionados con la Iglesia.
No concretos. No existe denominación alguna que haga referencia a una mujer concreta: Agustindarren plaza (plaza en la que se ubica el convento de las Agustinas), Arantzazu plaza, Ave Maria parkea, Madalena kalea, Santa Barbara bailara y Zikuñagako Ama bailara.
24 de hombre. Por el contrario, son 24 las calles que llevan nombre de hombre, en su mayoría vinculados a la Iglesia.
Con nombre y apellidos. Sin embargo, todas esas calles tienen nombre y apellidos, haciendo alusión a un personaje concreto: Antsorena Anaien kalea, Aristizabal kalea, Biteri kalea, Eduardo Chillida Pasealekua, Elías Querejeta plaza, Elkano kalea, Felipe Sagarna Zapa kalea, Gabriel Celaya plaza, Gartzia Goldaratz kalea, Ibarrolaburu plaza, Iturriaga kalea, Izpizua kalea, Jose Ramon Almarza Atarrabiyo parkea, Jose Manuel Aristimuño Pana parkea, Kardaberaz kalea, Karmelo Labaka kalea, Larramendi kalea, Lizeaga kalea, Mañe y Flaquer plaza, Orkolaga kalea, Perkaiztegi kalea, Txirrita kalea, Urbieta kalea y Víctor Hugo kalea.