Donostia. El Ayuntamiento ha iniciado los trámites para modificar el Plan Especial de Rehabilitación de la Parte Vieja y el Puerto con el fin de poder autorizar la construcción de 16 nuevas viviendas en el muelle, concretamente, en la zona comprendida entre el Soterotxo y el muelle de la Jarana, en el inicio de los soportales. La operación persigue sustituir las viejas viviendas que se asientan actualmente en la ladera de Urgull (portales número 7 y 8 de la calle Muelle) y que presentan problemas de habitabilidad, como filtración de aguas pluviales, y de accesibilidad.
El concejal de Urbanismo, Ricardo Burutaran, presentó ayer los detalles del proyecto y avisó de que su ejecución podría ser desautorizada por el Gobierno Vasco si decreta finalmente la catalogación como conjunto monumental de toda la Parte Vieja y el Puerto.
"Cuando el Gobierno Vasco dicte, si lo hace, porque todavía no ha emitido ningún informe, el decreto de protección, este es automáticamente de obligado cumplimiento y habría que incorporarlo directamente al Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbano Construido (Peppuc)", explicó el responsable municipal, al tiempo que agregó que "habrá que ver, en cualquier caso, las limitaciones que establece".
Pese a esta declarada incertidumbre, el Ayuntamiento ha considerado oportuno actuar en esta zona, para dar solución a una edificación "al borde de la ruina", adosada a la muralla y con "evidentes problemas de accesibilidad". "Unas edificaciones en las que se filtran aguas pluviales, incluso en alguna ocasión mezcladas con aguas fecales", recalcó ayer Burutaran.
En este sentido, incidió en la necesidad de realojar a los residentes en los actuales números 7 y 8 de la calle Muelle en viviendas nuevas sin barreras arquitectónicas y en condiciones adecuadas de habitabilidad. Respecto a la accesibilidad, el proyecto contempla la creación de un acceso directo desde el paseo, eliminando así las dificultades actuales de acceso a estos edificios de la parte alta de la parcela, junto a la muralla.
Además de esta necesidad de realojo solicitada por los propios residentes, Burutaran justificó la ejecución de este proyecto recordando que en la misma parcela existieron otras viviendas en el pasado, pero debido a un incendio, fueron demolidas. Ahora, en su lugar, la operación contempla la construcción de un bloque escalonado en tres alturas. De este modo, la nueva edificación se dividirá en tres volúmentes.
preservar la muralla El concejal de Urbanismo aseguró ayer que la operación "no supondrá ninguna afección a la muralla" protegida que rodea la ladera de Urgull. "El objetivo es permitir la continuidad de la muralla, separando en tres metros la edificación en su fachada trasera", precisó, para añadir que tampoco el nuevo bloque de viviendas tapará la muralla, ya que la altura se ajusta a la cota de la cornisa de las edificaciones del Muelle de la Jarana.
Además, el edil de Bildu señaló que la arquitectura del edificio propuesta es "unitaria, contemporánea y, sobre todo, respetuosa con las edificaciones del entorno, tal y como exige el Plan General". El estudio que ha elaborado este proyecto de promoción privada hace una propuesta de integración en el entorno que se basa en un edificio con una fachada que se asemeja a la imagen de cajas de pescado y en la parte alta mantiene la tipología de las actuales viviendas blancas.
Por último, Burutaran señaló que los promotores privados están interesados en solicitar la licencia de obra inmediatamente después de que el Plan Especial sea aprobado.