¡Katapum! El cañón de 1808 que se encarga de encender la mecha de la Aste Nagusia donostiarra desde hace 21 años descargó ayer a la vez que se lanzaban al aire confetis y serpentinas de colores en la terraza de Alderdi Eder, como un guiño a la ciudad que este año cumple y celebra los 200 años de su reconstrucción.

Como es habitual, el público abarrotó los jardines de Alderdi Eder y la calle Hernani para poder presenciar en directo el acto con el que arranca simbólicamente la semana de fiestas de agosto de la capital guipuzcoana. El Artillero Mayor, Luis Mokoroa, volvió a ejercer como tal y se encargó de dar fuego a la mecha festiva. Antes, cerca de 70 donostiarras que, a lo largo de todo el año, participan de modo voluntario en los distintos festejos de la ciudad, se convirtieron en protagonistas del acto, cantando a coro la canción Artillero dale fuego. La música corrió a cargo del Batallón de Honor de la Cofradía Vasca de Gastronomía.

Todos los voluntarios asistieron con camisetas blancas, que mostraban en la parte delantera el cartel de las fiestas de este año, con un muñeco de arena. El alcalde, Juan Karlos Izagirre, con camisa a cuadros txuriurdin y pañuelo festivo, acompañó a estos donostiarras que trabajan sin cobrar para el éxito de las fiestas en su interpretación musical. También lo hicieron representantes de todas las formaciones políticas presentes en el Ayuntamiento, algunos de ellos ataviados con camisetas blancas y pañuelos azules, y otros, con ropa habitual.

los protagonistas

Bailando al agarrado

La música del Artillero animó a representantes municipales y a los voluntarios más festivos a marcarse unos bailes al agarrado en la terraza de Alderdi Eder, mientras el público situado en los jardines contemplaba las evoluciones de los protagonistas del primer acto de la Aste Nagusia, que finalizará el sábado próximo.

El regidor se mostró exultante tras el acto y manifestó: "Es muy emocionante y es un acierto que sean los voluntarios los encargados de iniciar las fiestas". La corporativa de Bildu, Naiara Sampedro, acompañada de su hijo, recordó que habían sacado a bailar a ediles de todos los partidos de la corporación. La joven concejal, vestida de blanco, se mostró feliz por el desarrollo del acto. "Se me han puesto los pelos de punta", aseguró con una sonrisa.

Una vez cumplido el trámite de encender el cañón, los artilleros lanzaron varias salvas al aire para recordar al público presente que era el momento de lanzarse a las calles y divertirse, gracias también al inmejorable tiempo que reinó ayer, con el sol luciendo y una temperatura agradable. Como dijo Mokoroa tras lanzar el cañonazo: "¡Es el momento de salir todos a la calle! Y los que ya estaban en ella comenzaron su recorrido por la zona festiva, donde al estruendo del cañonazo siguió el potente sonido del grupo de rock y ska Skakeitan, que ofreció su música en el Boulevard, arrancando así con las innumerables actividades musicales de esta semana repleta no solo de actos, sino también de personas venidas de todos los rincones de Donostia y de Gipuzkoa entera.

La música de la batukada también animó los alrededores de la casa consistorial, en un acto que tampoco quisieron perderse los gigantes de la comparsa Itzurun, símbolo estético de las fiestas donostiarras de agosto.