"En mis ilustraciones de madera reflejo situaciones de la vida diaria que vivimos las personas sordas"
Julián Rodríguez es miembro de la asociación de sordos de Tolosaldea-Goierri y durante este mes expone en la universidad de Deusto sus ilustraciones hechas con madera. En cada lienzo plasma situaciones diarias que viven los sordos "por las barreras comunicativas que existen"
Tolosa. La ley de la Lengua de Signos ha facilitado en cierta manera la vida a la comunidad sorda en la esfera pública, pero la cosa se complica cuando estas personas quieren ir a una academia privada a preparar oposiciones, a un evento cultural o quieren informarse de los horarios del autobús. Julián Rodríguez, miembro de la asociación de sordos Gainditzen de Tolosaldea-Goierri, ha elaborado una colección de ilustraciones de madera y en cada una de ellas refleja con desesperanza las situaciones de discriminación que viven las personas sordas en la vida diaria.
¿Cómo surgió la idea de realizar una exposición en la universidad de Deusto?
En la semana de sensibilidad de la comunidad sorda del año pasado en Tolosa expuse estas obras y la universidad de Deusto se interesó. Me propusieron realizar la exposición en la universidad y estoy muy agradecido. Se puede visitar hasta el 24 de mayo. Son catorce ilustraciones hechas con madera que reflejan situaciones de la vida diaria que vivimos los sordos. Por ejemplo, ¿qué haces si se te avería el coche en la autovía?, ¿cómo te comunicas? ¿O las personas sordas que están en un hospital cómo se comunican? Las enfermeras deberían conocer mínimamente el lenguaje de signos.
¿Tiene el arte como afición?
Realmente no es una afición. La comunidad de personas sordas vemos los problemas que tenemos y sentimos una necesidad. Tenemos unos derechos y debemos visibilizarlos. Me he sentido obligado a hacer este tipo de cosas, porque tenemos muchos problemas todos los días. Ayer mismo tuvimos que suspender una reunión en el Ayuntamiento de Tolosa porque no podíamos comunicarnos. Hemos quedado otro día con la presencia de un intérprete.
¿El mayor problema es el de la falta de intérpretes?
Antes había problemas por falta de intérpretes, pero con los recortes el problemas es mucho mayor. En Gipuzkoa solo tenemos un intérprete para lenguaje de signos disponible y aproximadamente somos 500 o 600 personas sordas. Siempre que llamamos está ocupada y, además, tienen prioridad las situaciones de emergencia, como es lógico. Si necesitamos intérprete, tenemos que llamar dos o tres días antes.
¿El paro afecta más a este colectivo?
Hay mucho paro entre los sordos, porque a las empresas parece que no les interesamos. Hay mucha queja. Ahora las personas sordas están estudiando, están formadas, pero no encuentran trabajo. Tienen que ir a un centro especial de empleo, lo que puede ser Gureak. La situación es muy difícil, porque se hace un gran esfuerzo, y no vemos recompensa. Por ejemplo, los sordos podemos trabajar igual en un taller, pero el empresario tiene que adaptar la máquina. Hay que tener voluntad.
¿Y cómo pueden disfrutar de las actividades culturales?
Es muy difícil, porque hace falta mucho dinero para que un concierto sea accesible para nosotros. Se siente diferente, pero hay personas sordas a las que les gusta el ambiente, sienten la vibración y les gusta participar. Este año también organizaremos en Tolosa en noviembre la Semana para la Sensibilización de la Comunidad Sorda con muchas actividades.
¿Cómo se sienten ante estas situaciones de discriminación?
Hay que tener mucha paciencia. Estamos hartos y cansados, porque llevamos muchos años luchando. En Tolosa llevamos años organizando actos muy importantes, la Semana de Sensibilización, el concurso de cortos... pero al final dudas de que sirva para algo. Las diputaciones y el Gobierno Vasco entienden la situación, pero cuesta.
¿Cada vez más gente conoce el lenguaje de signos?
Sí, cada vez hay más gente, pero un intérprete profesional es diferente. Como colectivo necesitamos intérpretes. En cuanto a la gente que conoce el lenguaje de signos, en Tolosa hay una farmacia en la que hay una chica que sabe y en un bar también. Para nosotros es una alegría muy grande.
Las nuevas tecnologías están a su favor, ¿verdad?
Sí, con la webcam por ejemplo nos comunicamos muy bien. Sin embargo, la gran prioridad siguen siendo los intérpretes, es la gran barrera comunicativa que tenemos.