MELCHOR, Gaspar y Baltasar navegan ya por las aguas cantábricas para atracar su barca en el muelle de Donostia a las 14.50, si el mal tiempo no lo impide. Los tres Magos han optado este año por llegar en barco a la ciudad y olvidarse de los elefantes y dromedarios que les trasladaron los pasados años hasta la capital guipuzcoana para recoger las cartas de los niños, recorrer la ciudad y repartir los regalos por la noche.

El medio de transporte elegido en esta ocasión por Sus Majestades de Oriente es distinto al de años pasados. A este respecto, el concejal socialista Denis Itxaso recordó ayer que la llegada de los Reyes en animales exóticos fue imagen en los telediarios y contribuyó a dar a conocer la belleza de la capital guipuzcoana. A pesar de ello, no quiso entrar en la "crítica política en un asunto que debe estar presidido por la magia". En esta ocasión, los Reyes han optado por la más económica txalupa, quien sabe si por la crisis o por otro motivo.

A los niños, en realidad, les da igual cómo lleguen, solo desean verlos y estarán esperándoles en el muelle a partir de las 14.50, como suele ser habitual. Desde aquí, los Reyes se acercarán al Ayuntamiento donde se sentarán en sus tronos para recibir a los niños que les entregarán sus cartas llenas de deseos. La recepción real comenzará a las 15.30 y durará dos horas. Pero a las 17.00 se impedirá ponerse a la cola, ya que Melchor, Gaspar y Baltasar deberán preparase para la Cabalgata, que saldrá a las 18.00 horas para recorrer el Centro de la Ciudad. Los txikis con alguna minusvalía podrán acceder por una puerta especial que les evitará tener que hacer cola.

Caramelos

Una tonelada

En su recorrido por el Centro de Donostia, los Magos del Oriente viajarán cómodamente en sus carrozas y, con la ayuda de los pajes que les acompañarán, lanzarán caramelos al público. En sus paquetes traen nada menos que una tonelada de dulces para los pequeños donostiarras, todos ellos aptos para celíacos, según informó el Ayuntamiento.

La cabalgata de los Reyes contará, como es habitual, con distintos animales además de un séquito de más de 500 personas, entre ellos pajes y antorcheros, que les guiarán por las calles de la capital guipuzcoana. El desfile finalizará con una grúa de los bomberos, por la que ascenderán por la noche para llegar a los pisos más altos a depositar los regalos.