Donostia. El hotel María Cristina de Donostia se cerrará después del próximo Festival de Cine, el 9 de octubre, y volverá a abrir sus puertas en julio de 2012. En esos nueve meses, se modernizará la mayor parte del interior del edificio y sus 136 habitaciones. Además, se redistribuirán y reformarán los espacios comunes, como son el bar y cafetería, el restaurante y los salones de la planta baja, con el fin de mejorarlos y convertirlos en un punto de encuentro "abierto tanto a los clientes como a la ciudadanía", según destacó ayer el alcalde de la ciudad, Odón Elorza. Por el contrario, las fachadas y la estructura exterior del inmueble no van a ser intervenidas.
El regidor informó de que esta actuación costará unos 19,5 millones de euros, de los cuales el Ayuntamiento aportará en torno a tres millones, ya que la Administración local es propietaria del hotel, el único de estas características en Donostia. Esta intervención será la más importante de las que se han efectuado en el establecimiento desde 1987.
La cadena hotelera Starwood, que gestionará las instalaciones mediante una concesión hasta 2038, ultima en la actualidad los detalles del proyecto que se va a realizar, así como la aportación económica concreta a la que deberá hacer frente el Ayuntamiento.
El concejal de Fomento, Enrique Ramos, informó de que la entidad aporta unos 600.000 euros anuales al Consistorio en concepto de arrendamiento por las instalaciones hoteleras. Esta cantidad varía en función de la facturación alcanzada y en algún caso ha llegado a 700.000 euros.
El alcalde apuntó que esta actuación tenía que haberse abordado hace tres años, pero "ha sufrido distintos avatares". Asimismo, señaló que la cadena Starwood "ha hecho el esfuerzo" de ajustar la obra a un plazo reducido de nueve meses, "que ojalá se cumpla".
Habitaciones familiares La intervención contempla tres tipos de reformas para las habitaciones. El primero afectará a un grupo que se conservará íntegramente, con ligeras mejoras, porque estas son consideradas como "el alma del hotel". Un segundo grupo será "semirrestaurado" y un tercero, que incluye las habitaciones que presentan peores condiciones, se someterán a una rehabilitación integral, incluyendo todo el mobiliario.
Una vez concluidas las obras, el renovado hotel María Cristina conservará sus cinco estrellas y tendrá 110 habitaciones estándar y 26 suites. Además, catorce de ellas se adaptarán para personas con discapacidad y otras se habilitarán para alojar a familias mediante comunicaciones de unas con otras.
"Una ciudad como San Sebastián tiene que tener un hotel de lujo. Ojalá tuviera más y, sobre todo, clientela para llenarlo todos los días del año", manifestó el alcalde.
Elorza expresó además su deseo "como ciudadano" de que "algún día se puedan utilizar las terrazas que dan al río para poder tomar algo". Para ello, habría que "encontrar una estructura de cristal con la perfilería ligera idónea" para que ese acristalamiento de alguna de las terrazas "no genere un impacto negativo en la fachada" y pudiera obtener el visto bueno de la Diputación foral.