Tolosa. A partir de este sábado el cementerio de San Blas de Tolosa será un camposanto más digno, ya que será entonces cuando se coloque un monumento a las víctimas del franquismo durante la Guerra Civil y el pueblo de Tolosa rendirá un homenaje a todos los represaliados, a partir de las 11.00 horas. El acto será popular, participarán todos los partidos políticos y portavoces sindicales, tendrá lugar una ofrenda floral, y todo el que lo desee podrá asistir.

Además, hoy se presentará en el salón de plenos de Tolosa, a las 19.30 horas, el libro Historia eta Memoria 1936-45, del investigador Mikel Errazkin. En la presentación también participarán Francisco Etxeberria y Juantxo Agirre Mauleón, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, y el alcalde de Tolosa.

El homenaje del sábado será uno de los momentos clave del trabajo que están realizando desde 2006 el Ayuntamiento y Aranzadi, con el objetivo de analizar e manera rigurosa y exhaustiva todo lo acontecido en Tolosa durante los años de la Guerra Civil y la posguerra. La pared de piedra de la entrada del cementerio de San Blas fue testigo mudo de muchos de los fusilamientos que se llevaron a cabo durante este periodo. Tolosa, al igual que muchos otros municipios, no ha hecho nada hasta ahora para devolver la dignidad de los defensores de la República y Euskal Herria, que fallecieron luchando por sus ideales. El monumento que se inaugurará el sábado en el cementerio de San Blas, cerca de la cripta que el Ayuntamiento de Tolosa posee para enterrar a sus Hijos Predilectos, mantendrá vivo el recuerdo de todos ellos.

El monolito será simple, con tres placas donde se colocarán los nombres y apellidos de todos los muertos. Se escribirán los nombres de 104 tolosarras bajo los siguientes encabezamientos: fusilados tolosarras, fusilados no tolosarras en el camposanto de Tolosa, muertos en los lugares de concentración y en los Batallones de Trabajadores, y civiles fallecidos en bombardeos.