La ordenanza para transformar locales en vivienda se debatirá en el pleno de diciembre
la normativa prevé un pago de entre 3.000 y 9.000 euros por la conversión El texto que se somete ahora a las alegaciones de los grupos mantiene las restricciones de altura en los barrios céntricos
Donostia. El gobierno de la ciudad presentó ayer su propuesta de ordenanza para convertir locales en viviendas que se debatirá, previsiblemente, en el Pleno de diciembre (después de recibir las enmiendas que puedan presentar los grupos). El contenido del texto recoge que la superficie mínima para que locales de planta baja y entresuelo puedan ser transformados en vivienda es de 35 metros cuadrados en lugar de los 85 exigidos hasta ahora.
Además, la propuesta incluye que el propietario que solicite la transformación deberá abonar al Ayuntamiento el 15% del incremento del valor urbanístico derivado de esa conversión. Y es que un local en un edificio de viviendas libres pasará a ser, también, de carácter libre, lo que aumentará su valor en el mercado. Así, el pago que debería asumir el propietario podría oscilar entre los 3.000 y los 9.000 euros, según calculó ayer el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento, Jorge Letamendía, aunque habrá que tener en cuenta en cada caso la superficie del local en cuestión y la zona en la que se encuentra.
El corporativo explicó, además, que la ordenanza distingue dos zonas de la ciudad. En los barrios céntricos y las calles más comerciales de todo el municipio se mantienen las restricciones actuales referentes a la altura mínima de 2,2 metros respecto del suelo para las ventanas (esta exigencia se puede sustituir por una terraza de tres metros entre la fachada y el espacio público), que en el resto de la ciudad se eliminan. El objeto de esta distinción es, según edil, conservar los locales comerciales y su actividad en las principales arterias.
Letamendía añadió que el texto propuesto no afecta a la Parte Vieja, a la espera de que se renueve el plan especial para este barrio con características propias. Tampoco afecta a polígonos o áreas que no sean residenciales, donde seguirá sin estar permitida la reconversión.
La ordenanza regula, asimismo, la división de viviendas. A partir de ahora, un piso de 130 metros cuadrados podrá convertirse en dos. Se admiten fracciones de 45 metros cuadrados que completen 85 metros cuadrados útiles para poder dividirlo (de ahí los 130 mínimos). Hasta ahora, no existía la posibilidad de utilizar fracciones, por lo que sólo se podía dividir en dos un piso de, al menos, 170 metros cuadrados (y, a partir de ahí, múltiplos de 85).
Otro de los puntos incluidos es el de la posible conversión de locales que colinden con actividades con mayor contaminación acústica, como bares o talleres. Letamendía señaló que su objetivo es abrir un debate con hosteleros y comerciantes en torno a tres alternativas: no permitir la reconversión, autorizarla y que el propietario del local contaminante asuma una intervención para aislar el colindante o permitirla y que sea el propietario del local el que financie el aislamiento. La ordenanza apuesta por la última opción.
plazos Aprobada por el Gobierno, la ordenanza podrá ser ahora enmendada por los grupos de la oposición, a quienes ya se ha remitido el texto. Si se cumplen los plazos, el texto y las enmiendas se votarían en el pleno de diciembre de este año, tras lo cual se iniciaría el periodo de exposición pública. La aprobación definitiva de la ordenanza llegaría, según los cálculos de Letamendía, en la sesión plenaria de febrero o marzo.
El concejal insistió, de todos modos, en que han esperado a la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana de Donostia (publicado ayer por el Boletín Oficial de Gipuzkoa), de rango superior, para tramitar esta ordenanza.