Tolosa. El transporte público que da servicio a zonas rurales es la asignatura pendiente de muchos municipios, y también la de Tolosa. El plan de Movilidad Sostenible aborda la cuestión y propone un servicio de taxi a determinadas horas. Los residentes en los barrios rurales de Urkizu, Aldaba y Bedaio suman actualmente 232 vecinos.
El informe redactado por la empresa especializada Leber descarta la implantación de autobuses "ya que requieren de una infraestructura de equipos y personal para la recogida de llamadas y gestión de rutas" que se considera "excesiva para las posibilidades de un servicio municipal".
Por este motivo, el Plan de Movilidad propone un sistema "más sencillo, autogestionado entre usuarios, taxistas y el Ayuntamiento". El objetivo sería ofrecer viajes exclusivamente al centro de Tolosa (casco y ensanche) y a la clínica y el polideportivo Usabal. Según la propuesta, se podría plantear el requisito de que sea un servicio para usuarios registrados en el ayuntamiento, quienes tendrían un carné. Esto ayudaría a evitar el fraude.
Los viajes en taxi se prestarían a horas fijas; por ejemplo, a las 10.00, 14.00 y 19.00 horas. El usuario debería solicitar el viaje durante los quince minutos anteriores a estas horas, ya fuese por teléfono o con la presencia en la parada. Un taxista realizaría dicha carrera y las que hubiera hasta la hora señalada para los mismos puntos de recogida.
Tras la carrera, el usuario pagaría un precio (por ejemplo, 3 euros) La impresora reglamentaria conectada al taxímetro emitirá un tique que el ciudadano firmará, escribiendo su número de DNI así como el de usuario. De esta forma, el Ayuntamiento reintegraría la carrera descontando lo que paga el cliente. Los servicios Urkizu, Aldaba y Bedaio suponen respectivamente 17, 24 y 33 kilómetros, contando la ida y la vuelta. En cuanto a la estimación de costes, el informe supone que el servicio realizará nueve viajes a la semana, lo cual supondría unos 666 kilómetros semanales y 33.300 anuales. Basándose en costes de otras experiencias, en concreto en el municipio de Dima (Bizkaia), el costo del servicio sería de 40.000 y 50.000 euros anuales, lo que el borrador reconoce como "considerablemente elevado". En el caso de que se les cobraran 3 euros por viaje, los usuarios aportarían 1.350 euros.