Rodolfo Sancho, el padre del chef acusado de asesinar y descuartizar al cirujano Edwin Arrieta, ya está en España. Lo hizo en el día de ayer, al llegar al aeropuerto de Madrid-Barajas en compañía de su abogado, Marcos García Montes. Tras pasar una semana en Tailandia para volver a ver a su hijo, que sigue preso en la cárcel de Koh Samui, y que fue visitado por su madre Silvia Bronchalo, el actor se mostró nervioso en su reaparición y apenas habló con los medios.

Tras aterrizar en Madrid, Rodolfo Sancho aparecía junto a su abogado dirección a los ascensores, que los llevarían a un vehículo para abandonar el aeropuerto. En ese momento, el padre del cocinero estalló ante los medios: “Tío, ya te he dicho que no voy a hablar. Ya te lo he dicho. Podéis hablar con Carmen y Ramón”, expresó, en referencia a los portavoces de la familia. El que fuese parte del elenco de ‘El ministerio del tiempo’, además, explicó que no hablaría con la prensa, negándose en redondo a dar información acerca de cuestiones relacionadas con el caso del crimen a Edwin Arrieta.

El intérprete tenía en mente poner rumbo a Fuerteventura para pasar tiempo con su pareja, Xènia Tostado, y su hija menor. Cuando este se dirigía a facturar su equipaje, los medios de comunicación le preguntaron sobre Silvia Bronchalo: “Qué pesados, de verdad”, contestó Rodolfo, para acto seguido pronunciarse en torno a un posible cambio de abogados: “Es compatible para que no me andéis preguntando a mí. No sé, pregúntaselo a ellos”. A continuación, el actor zanjó su postura ante las insistentes preguntas los reporteros: “Ya dije que no iba a hablar más, ¿No? Ya está, gracias. No sé por qué insistís, si ya he dicho que no voy a hablar”. En los siguientes minutos, Rodolfo Sancho hacía gestos de cansancio para terminar con las interpelaciones de los periodistas: “Gracias, buenos días”.

Su actitud ante la prensa

Rodolfo Sancho se ha mostrado notablemente alterado en los últimos días. Cuando se encontraba en Tailandia, el intérprete tuvo unas duras palabras duras contra los reporteros, ganándose sus críticas. El padre del chef se presentaba en un modo desafiante: “Creen que estoy tirado por los suelos, ese no soy yo Hay dos formas de tomarse las cosas en la vida, o como una desgracia o como un reto. No van a conseguir lágrimas”.

Algo más tarde, en una conexión con los platós de televisión, el actor pedía disculpas: “La imagen que di fue de alguien prepotente, sabéis que siempre he tenido una sonrisa para vosotros, es un momento duro y complicado. Quiero que se entienda que esto es un mecanismo que uso para ayudar a mi hijo”.