La sidrería guipuzcoana que conquista a Belén Rueda, Hugo Silva o Antonio Resines
Reconocidos actores han disfrutado este domingo de la gastronomía vasca en una de las mejores sidrerías del territorio
Las sidrerías son uno de los grandes reclamos turísticos de Gipuzkoa. Cada año miles de personas visitan el territorio para deleitarse del txotx, una tradición única y muy característica de la zona.
Aunque la temporada aún no ha empezado, muchas sidrerías ofrecen su servicio de forma ininterrumpida durante todo el año. Es el caso de Petritegi Sagardotegia, que este domingo contó con la visita de algunos de los rostros más conocidos de la televisión y del cine.
Un decena de actores
Belén Rueda, Hugo Silva, Arturo Valls, Gorka Otxoa, Antonio Resines, Inma Cuesta, Esmeralda Pimentel, Carlos Eduardo, Ernesto Alterio y Secun de la Rosa tuvieron la ocasión de disfrutar de lo mejor de la gastronomía vasca en esta reconocida sidrería, ubicada en Astigarraga.
Los actores forman parte de la película Un funeral de locos, que llegará a los cines el próximo año.
En el vídeo, compartido por el donostiarra Gorka Otxoa, se puede ver a los actores disfrutando de lo más característico de las sidrerías, el txotx.
Símbolo de Gipuzkoa
Las sidrerías guipuzcoanas son un símbolo de la cultura y la gastronomía guipuzcoana, un lugar donde tradición y sabor se unen para ofrecer una experiencia única.
En pueblos como Astigarraga, Hernani y Usurbil se concentra un gran número de estas sidrerías, conocidas por su sidra natural y por sus menús auténticos y sencillos, pero llenos de sabor.
El ambiente en una sidrería guipuzcoana es especial: largas mesas compartidas, grandes barricas de madera y una atmósfera festiva que invita a la conversación y al disfrute.
El ritual de la sidra, conocido como el "txotx", es uno de los aspectos más característicos de la visita. Durante el txotx, los visitantes se acercan a las barricas para probar la sidra directamente, que fluye desde un pequeño grifo y se sirve en el vaso desde una altura considerable para oxigenarla y resaltar sus sabores y aromas.
Esta sidrería guipuzcoana gana el premio a Mejor Sidra en la mayor competición internacional de esta bebida
El menú en estas sidrerías suele ser fijo y tradicional, centrado en productos locales de alta calidad. El plato estrella es la chuleta a la parrilla, acompañada de tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos verdes y, de postre, queso Idiazábal, membrillo y nueces. Este menú sencillo pero sustancioso resalta los sabores auténticos y acompaña perfectamente la sidra, de sabor fresco y ligeramente ácido.
Las sidrerías guipuzcoanas son mucho más que un lugar para comer y beber; son espacios de encuentro y de preservación de una tradición ancestral.
Durante la temporada de sidra, que va de enero a abril, reciben a miles de visitantes, tanto locales como turistas, que se acercan para disfrutar de una experiencia que conecta con la historia y el corazón de Euskadi.