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Fue fisioterapeuta de Croacia en el Mundial de 1998

Juan Muro vivió en primera persona el tercer puesto de la selección balcánica

donostia. Davor Suker fue uno de los jugadores con los que más conectó Juan Muro desde que está en el Real Madrid. Tras la temporada 1997-98, el delantero quiso que el donostiarra le acompañara al Mundial de Francia, donde participaba con la selección de su país, Croacia. Muro aceptó y la experiencia no pudo ser mejor, ya que el combinado balcánico, que no partía entre los favoritos, acabó el campeonato en tercer lugar.

"Me integré mucho. En un principio, iba como el fisioterapeuta personal de Suker, pero al final trabajé como uno más. Fuimos sin grandes expectativas, pero cuando eliminamos a Rumania en octavos, la atención mediática creció. Y cuando cayó Alemania en cuartos...". La selección arlequinada no estuvo lejos del título: "Casi somos campeones. Francia remontó en semifinales, y en el tercer y cuarto puesto ganamos a Holanda. La experiencia fue increíble. Suker, que era el que había apostado por mí, acabó como máximo goleador del torneo, así que me tenían como una especie de talismán".

Muro conoció incluso al presidente croata de entonces, Franjo Tudman: "Antes del partido de cuartos, estábamos comiendo con los políticos y militares del país. En los postres me llamó Suker y me dijo que me sentara con él. Me puso enfrente del presidente. Yo había aprendido algo de croata, me sabía algunos cánticos y nos pusimos a cantar. La verdad es que toda la experiencia fue increíble. Lo pasamos muy bien y todavía tengo contacto con algunos de ellos".