- La Comisión Europea prevé que España sea la economía de la Unión Europea más golpeada por la pandemia este año, con una caída de su producto interior bruto del 12,4% y un aumento de la tasa de paro hasta el 16,7%. Las previsiones macroeconómicas publicadas ayer por el Ejecutivo comunitario empeoran además el rebote proyectado para 2021, cuando el PIB aumentaría un 5,4% frente al 6,1% calculado en verano, mientras que para 2022 esperan que crezca el 4,8%.

Aunque ninguna economía europea se salva de la caída provocada por el COVID-19, el desplome de España será el más acusado de los Veintisiete, por delante de Italia (9,9%), Francia (9,4%), Portugal (9,3%) y Grecia (9%), y lejos de los retrocesos de otras grandes economías del euro como Alemania (5,6%) o Países Bajos (5,3%). El nivel de desempleo en España, por su parte, escalará al 17,9% en 2021 y se reducirá al 17,3% en 2022, también los niveles más altos de la UE.

El comisario de Economía, Paolo Gentiloni, atribuyó el mayor impacto a que “la segunda ola ha golpeado a España antes que a otros países” y a la estructura de la economía estatal, en la que tiene gran peso sectores como el turismo, muy afectado por las restricciones.

El comisario subrayó, sin embargo, que en 2021 crecerá por encima de la media europea y que el análisis de Bruselas “no pone en cuestión” las decisiones del Gobierno español. “Continuaremos cooperando y tengo total confianza en la acción del Gobierno para afrontar esta difícil situación”, dijo.

El repunte de las infecciones y las nuevas restricciones para contenerlas han frenado en España, como en el resto de la UE, el fuerte rebote de la economía registrado en verano tras un desplome récord, del 22,1% del PIB, en la primera mitad del año.

A partir de 2021, Bruselas prevé que mejore el consumo y disminuya el ahorro de los hogares y que las exportaciones vuelvan a contribuir al crecimiento conforme se recuperan turismo y comercio. Con todo, para finales de 2022 el PIB español seguiría un 3% por debajo del nivel previo a la crisis.

El impacto presupuestario de estas y otras medidas de contención del COVID, que Bruselas cifra en el 1,3% del PIB, sumado a la caída de la recaudación tributaria, hará que el déficit público se dispare hasta el 12,2% este año. En 2021 se estrechará al 9,6% y en 2022 al 8,6%. Se trata del déficit más abultado de la eurozona, según la Comisión, que recordó que las líneas de avales públicos activas por la pandemia aunque son “un apoyo crucial”, también suponen un riesgo para la perspectiva fiscal.

La contracción del PIB y el aumento del déficit elevarán la deuda pública 25 puntos este año, hasta el 120,3%, y esta seguirá creciendo hasta el 122% en 2021 y al 123,9% en 2022.