dOnostia - Euskadi ha puesto en marcha, junto con las regiones de Karelia del Norte (Finlandia) y Renania del Norte-Westfalia (Alemania), una red europea de biorregiones para promover la cooperación entre ellas con el fin de fomentar la “bioeconomía” a través del desarrollo sostenible y la descarbonización del modelo económico.

La iniciativa, promovida por el Instituto Forestal Europeo, fue presentada ayer en un acto en Bilbao con la presencia del lehendakari, Iñigo Urkullu, quien resaltó “el compromiso” del País Vasco con el desarrollo sostenible y la importancia de un modelo económico basado en el uso de recursos de naturaleza biológica.

Según Urkullu, Euskadi dispone de los recursos naturales y las capacidades tecnológicas necesarias para explorar nuevas oportunidades de un modelo de producción respetuoso con “Ama Lurra”.

“Trabajamos, afirmó, para mejorar y aumentar el uso de los recursos renovables para hacer frente a los retos mundiales, y también locales. Trabajamos desde la convicción de que la transformación ecológica y energética supone también una oportunidad para nuestro futuro”.

En una conferencia de prensa en el marco de este acto, la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, indicó que los integrantes de la red esperan la adhesión de nuevas regiones a la misma y puso de manifiesto que es “una prioridad” la descarbonización de la economía vasca como máximo para el año 2050.

En este sentido, Tapia destacó las nuevas oportunidades de negocio y empleo que presenta la bioeconomía en los ámbitos de la madera, la energía procedente de la biomasa y el tratamiento y minimización de residuos.

En Euskadi, el recurso natural más extendido y empleado para la transformación y generación de bioeconomía es la madera. Según la consejera Arantxa Tapia, el País Vasco cuenta con una superficie forestal arbolada del 55%, superior a la media europea (40%), con lo que la madera representa “una oportunidad clara”.

La bioeconomía también va a suponer “una oportunidad para el desarrollo” del ámbito rural en Euskadi, según señaló la representante del Ejecutivo vasco.

En Europa, la bioeconomía emplea ya a más de 18,6 millones de personas y factura 2,3 billones de euros, lo que supone el 9% del conjunto de la economía europea, según los promotores de la red de biorregiones.

En el acto, el director general del Instituto Forestal Europeo, Marc Palahí, señaló que la bioeconomía supone “un punto de encuentro entre tradición e innovación” ya que es innovadora “pero basada en recursos propios del país”.

También el representante de la región finlandesa de Karelia del Norte, Risto Poutiainen, y el consejero del departamento de Silvicultura y Conservación de la naturaleza de la región alemana de Renania del Norte-Westfalia, Hubert Kaiser, señalaron las nuevas oportunidades de negocio e inversiones que genera la bioeconomía.

“Tenemos que cambiar el carbono por otras soluciones amigables”, resaltó el representante alemán, quien instó a “actuar” ya.