donostia - La Dirección Provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) de Gipuzkoa ha reconocido el origen profesional del cáncer de pulmón que causó el fallecimiento de un trabajador que estuvo expuesto durante 45 años a humos de soldadura como cromo, cadmio y níquel.

CCOO criticó ayer que, pese a que la persona fallecida no era fumadora, Osakidetza “no realizó la preceptiva comunicación de sospecha de enfermedad profesional” y reclamó a las empresas que extremen las medidas preventivas en las operaciones que generen humos de soldadura.

El reconocimiento de la Dirección Provincial del INSS de Gipuzkoa supone el incremento de las prestaciones de viudedad y orfandad y ha originado nuevas prestaciones de muerte y supervivencia de la propia Seguridad Social, señaló el sindicato.

El trabajador J.B.L.A. murió con 60 años a finales de 2018 tras la exposición prolongada a los humos de soldadura en las empresas Talleres Arigala, donde estuvo empleado entre 1972 y 1983, Montajes Eissen en 1985, Montajes Tucal (1985-1997), Montajes Villasante (1988-1992), Montajes Bostak (1996-1997), Metalher (2022-2011), Hidralbi Montajes Hidráulicos (2016) y Oilgear Towel (2017). - Efe