El Ayuntamiento de Donostia aprobará “en breve plazo” sacar a concurso un estudio que permita llevar a cabo un cambio en el Plan General que señale qué barrios tienen demasiados hoteles y, por lo tanto, fijar zonas saturadas de ellos, como se hizo hace décadas con los bares tanto en la Parte Vieja como en las calles Reyes Católicos y San Bartolomé. El plan, previsto desde hace un año, preveía no permitir más hoteles si estos sobrepasaban el 25% de los usos terciarios de cada zona. Para aplicarlo, es necesario contabilizar los alojamientos y restos de usos terciarios.
El alcalde, Eneko Goia, calculó que el concurso para la redacción del estudio estará aprobado en “una semana o quince días”. De este modo, el Consistorio pretende poner cierto coto a la proliferación de establecimientos hoteleros e introducir la nueva norma dentro del Plan General en vigor, a la espera de que se apruebe el nuevo. Con la declaración de zonas saturadas de hoteles, los propietarios de edificios o terrenos terciarios no tendrán permiso automático para abrir un alojamiento, como sucede en la actualidad, ya que el Plan General en vigor incorporará un veto a esta opción en determinadas zonas.
Goia señaló que esta medida no tiene por qué ser definitiva para el control del turismo. “El urbanismo sirve para planificar la ciudad y las realidades son cambiantes. El Plan General de 2010 nació en unas circunstancias que luego han cambiado, como la aparición de apartamentos turísticos, que hubo que regular después”, señaló.
“Siempre hay que estar atentos a la evolución de las cosas y hacerlo con datos, no con impresiones, que es lo que está haciendo el departamento de Urbanismo para tener una ciudad equilibrada”, añadió.
A pesar de ello, Goia sostuvo que gran parte de la presión turística que afecta a la capital guipuzcoana no procede de las personas alojadas en distintos establecimientos sino en los visitantes o excursionistas de una jornada. Prueba de ello es que “los parkings de la ciudad se han llenado todos los días en verano y los usuarios no suelen ser personas alojadas en Donostia”, dijo el primer edil, que destacó que los visitantes de un día pueden estar hospedados en el entorno o, también, ser vecinos de localidades cercanas. Asimismo, consideró que el número de excursionistas de un día puede ser superior al de personas alojadas en la ciudad.
“Para las semifinales de rugby de 2023 tendremos que tirar del territorio y de territorios vecinos”
Goia añadió “ninguna zona de Donostia está por encima de lo que se suele considerar punto de equilibrio entre plazas de alojamiento y número de habitantes”, con la excepción de Igeldo, que tiene una gran superficie, pocos habitantes y un camping. “Algunas zonas de la ciudad están más cerca y otras más lejos de los considerados puntos de equilibrio pero tenemos que distinguir el fenómeno del turismo de alojamiento y el fenómeno del visitante”, recalcó el alcalde, que destacó la dificultades en regular el acceso de personas a la ciudad. “Nadie plantea poner un muro”, señaló.
Además, Goia aseguró que de las quince ciudades del Estado que aspiran a albergar el Mundial de Fútbol de 2030 “la que menor capacidad de alojamiento tiene es San Sebastián”, sin compararse con grandes urbes como Madrid o Barcelona, sino con otras similares, como Gijón o Bilbao.
Asimismo, añadió que para las dos semifinales de rugby que se desarrollarán en 2023 en Anoeta, Donostia tendrá que recurrir a alojamientos “en el territorio, en territorios vecinos y al otro lado de la muga”.
Tasa para Donostia
Por otra parte, el mandatario donostiarra manifestó que sigue apostando por la implantación de una tasa turística para la capital guipuzcoana, aunque da por zanjado el debate de los últimos tiempos con representantes socialistas como la portavoz de la formación en el Consistorio donostiarra, Marisol Garmendia, y el consejero de Turismo del Gobierno Vasco, Javier Hurtado.
“El debate público está zanjado, pero la apuesta del Ayuntamiento se mantiene”, dijo el regidor del PNV, que añadió que defiende la “naturaleza local de este tributo aunque para ello tiene que haber una habilitación y pelearemos por ello”. Goia, además, recordó que el consejero de Turismo dijo recientemente que “entendía que las circunstancias de Donostia son especiales y eso es lo que yo también reivindico, por lo que hay un planteamiento que puede ser analizado”.
