Algunos hoteles de Donostia han empezado a contratar chóferes con el fin de ofrecer un servicio adecuado a sus clientes ya que no hay suficientes taxis en determinados momentos.

Así lo aseguraron ayer fuentes del Ayuntamiento de Donostia, que ha iniciado un proceso de conversaciones con el gremio del taxi para tratar de solucionar una situación de carencia de servicio en determinados momentos. Actualmente, existen 308 licencias en vigor, de las que 70 están inactivas, lo que supone que hay un 22% menos de taxis que las que teóricamente necesita la ciudad.

La realidad es que el número ideal de taxis es variable, en función de numerosos factores, y el turismo es uno de ellos. En verano, por ejemplo, no siempre es fácil conseguir un taxi para la población local y, a tenor de las nuevas decisiones de algunos hoteles, tampoco lo es para el sector del alojamiento.

Pero no solo en verano hay momentos de dificultad para acceder a un taxi. Hay otras ocasiones en las que las centralitas no tienen vehículos disponibles para exasperación de quienes los necesitan.

Preguntado sobre la situación, el alcalde de Donostia, Eneko Goia, no descartó ayer que el Ayuntamiento decida aumentar el número de licencias de taxis, de modo que haya un mayor número de vehículos disponibles en todo momento para las necesidades reales de la población. Goia consideró “evidente” que hay un problema con el servicio de taxis, según “el número de reclamaciones” que recibe el Ayuntamiento.

“Si hay un número tan elevado de licencias sin uso y no se traspasan lo que se pone sobre la mesa es la posibilidad de que puedan existir nuevas licencias”, dijo el mandatario donostiarra, que recordó que el Ayuntamiento y el gremio de los taxistas han quedado citados para el mes de septiembre con el fin de acercar posturas sobre la situación que lleva siendo problemática desde hace tiempo.

Por ahora, los taxistas no quieren oír hablar de un aumento en el número de licencias, ya el negocio se tendría que repartir entre más personas, pero el Ayuntamiento no encuentra la fórmula para lograr que en cada momento exista un mínimo de vehículos de transporte de viajeros que sea suficiente.

La posibilidad de que el Ayuntamiento conozca en todo momento dónde está cada taxi para comprobar si están todos los que deberían estar, entre otras cuestiones, tampoco ha sido admitida hasta el momento.

Tampoco se permite ahora que los profesionales de otras localidades cercanas, con menor presencia de visitantes que Donostia en verano, puedan trabajan en la capital guipuzcoana cuando se vea necesario.

Hace cuatro años, el Ayuntamiento y los taxistas acordaron que modificarían el reglamento, vigente desde 1997, para introducir mejoras en el servicio. Sin embargo, hasta el momento, estas directrices no han cambiado. Tras el verano de 2018, portavoces del sector admitieron que se habían producido situación de colapso en algunos momentos, sin vehículos suficientes.