donostia - Con la proliferación del turismo, algunos rincones de Donostia adquieren nuevos aspectos y uno de ellos es el atrio de Santa María, cuyas escaleras se han convertido en marco ideal para descansar y, también, para tomar alguna consumición adquirida en los bares de las inmediaciones.

Tras recibir numerosas quejas de los vecinos por el ruido nocturno que producen quienes hacen uso de este punto como si fuera una terraza de hostelería, la Guardia Municipal desaloja algunas noches, en torno a las 23.00 horas, a quienes están consumiendo bebidas en las escaleras de acceso a la basílica.

El concejal de la Guardia Municipal, Martin Ibabe, recalca que “es una tarea que se hace habitualmente, no es una novedad, aunque se hace más hincapié en ella cuando hay más necesidad”. La medida se adopta con base en el decreto del Gobierno Vasco que determina los horarios de apertura y cierre de los locales de hostelería. - N.G.