donostia - La junta de gobierno del Ayuntamiento de Donostia dio ayer su aprobación a la autorización para que la constructora de la estación de autobuses de Atotxa pueda hipotecar el derecho de concesión de esta infraestructura, por un periodo de 50 años, según fue adjudicada. El permiso no da derecho a hipotecar los bienes sobre los que recae la concesión. Es decir, ni el terreno municipal sobre el que se construye, ni las infraestructuras que acogerá en el futuro pueden ser objeto de la hipoteca.
El pasado mes de octubre, la unión de empresas Intermodal Donostia, compuesta por otras entidades, entre ellas, la UTE Transitia, constructora del equipamiento, solicitó al Ayuntamiento el permiso para hipotecar la concesión, tal y como prevé el pliego de condiciones de la adjudicación.
El Gobierno municipal aprobó ayer la solicitud y obliga a que la hipoteca que se pudiera contratar se cancele cinco años antes de la fecha fijada para la reversión al Ayuntamiento de las instalaciones, prevista en 2064. Asimismo, concreta que no se admitirá la hipoteca en garantía de deudas que no tengan relación con la concesión de la estación. Además, el importe de la deuda no podrá superar el 90% de las inversiones que se deben ejecutar a cargo del concesionario. La estación tiene un presupuesto de 27,7 millones de euros, parte de los cuales corren a cargo de las instituciones locales. El Ayuntamiento aporta 8,7 millones de euros y el ente foral, otros 6.
Fuentes del Gobierno municipal recalcaron ayer que la posibilidad de hipotecar una concesión es habitual dentro de los pliegos de condiciones y que no le consta que las empresas tengan intención de hacerlo en un futuro próximo. “Se trata de que puedan recurrir a ello en caso de que tuviesen que refinanciar la obra en el futuro, por poner un ejemplo”, explicaron. En ese caso, y si llegase a ejecutarse la hipoteca, la gestora de la instalación dejaría de ser la UTE Intermodal Donosti y pasaría a ser la entidad bancaria correspondiente.
Está previsto que este mismo mes de noviembre finalice la excavación del hueco que acogerá la estación de autobuses. La estructura estará lista en verano, según el calendario previsto, y la obra concluirá a finales de 2015.
