Donostia. El grupo del PSE-EE en el Ayuntamiento de Donostia ha presentado 16 enmiendas al plan de inversiones que el Gobierno municipal ha pactado con el PNV. Según explicó ayer la concejala Susana García Chueca, estas propuestas "tratan de mejorar la calidad de vida de los barrios de la ciudad y de reducir una serie de gastos consignados que pueden esperar a una mejor situación económica, cuando no desaparecer, como el encargo de nuevos estudios para la ubicación de la estación de autobuses".
Los socialistas, que ya calificaron el plan de "poco ambicioso", aseguraron que los ingresos "arrastran una importante incertidumbre sobre su materialización". Para tratar de ajustar estas cuentas, el PSE-EE propone conseguir más ingresos, en concreto 800.000 euros, por el traspaso por parte de la Diputación de las carreteras de Añorga y Loiola-Martutene. "Creemos que la cantidad que el Ayuntamiento va a recibir por hacerse cargo de ambos viales es a todas luces insuficiente y que no se ha peleado debidamente para obtener mejores compensaciones para la ciudad", dijo García Chueca.
Entre las partidas que los socialistas reducirían se encuentran las destinadas a acondicionar el edificio de las antiguas escuelas de Igeldo, la pasarela peatonal de la calle Autonomía o el encargo de diversos estudios y proyectos.
"Con estas modificaciones, el superávit de la ciudad sería de en torno a los tres millones de euros. Y es preciso recordar frente a sus críticas interesadas que hablaban de una herencia nefasta de los socialistas, que ahora están calladitos porque las cuentas han arrojado un saldo positivo e incluso han podido elaborar un plan de inversiones sin mayor problema", dijo la edil.
Asimismo, las enmiendas contemplan un millón de euros para un plan de estímulo económico, 500.000 euros para la creación de un sistema de conexión vertical entre Morlans y Aiete, 500.000 euros para la mejora de aceras en Gros y Egia o 200.000 euros para una campaña de asfaltado, entre otras cuestiones.