Donostia. La Asociación Guipuzcoana de Familiares y Enfermos Psíquicos, Agifes, trasladará su actual centro de Loiola a Buenavista. El nuevo local estará situado en el paseo Casares número 9 del barrio donostiarra de Altza y contará con salas polivalentes para el desarrollo de actividades grupales, despachos de atención individual y cocina terapéutica, entre otras instalaciones.

El lugar ha sido cedido por el Ayuntamiento de Donostia por un plazo de 60 años. Agifes, por su parte, tendrá que abonar un importe de 185.124 euros que hará frente gracias a las subvenciones del programa Kutxazabal de la Obra Social de Kutxa.

"El de Loiola era provisional y lleva más de cinco años. Cambiamos porque necesitamos más espacio y un local capaz de albergar más servicios", manifiesta el vicepresidente de Agifes, Jose Mari Irazusta.

"El Ayuntamiento de Donostia ofreció varias opciones", afirma Irasturza, que añade que el recinto de Buenavista "está muy bien comunicado por el tren de Renfe, autobús y carretera y optamos por éste".

Como asociación no lucrativa Agifes cuenta con el apoyo de distintas instituciones que le han permitido contar con cuatro centros de rehabilitación, nueve pisos tutelados y una sede central repartidos por el territorio. Este nuevo centro asistirá a toda Gipuzkoa tratando de cubrir las 22 plazas concertadas con la Diputación, cuatro más que las 18 actuales.

"Abriremos a primera hora y terminaremos hacia las 17.00 horas, como en Loiola", concreta el vicepresidente, que añade que, también en Altza, "habrá estructuras orientadas a la atención de familiares, mediante expertos, grupos de apoyo, cursos, orientación e, incluso, con apoyo vacacional". Agifes lo llama "cuidar al cuidador", pues considera que las enfermedades mentales provocan un sufrimiento severo en las familias. Por eso, Buenavista también ofrecerá atención a los parientes a través de reuniones y asesorías.

La agrupación se muestra tranquila en cuanto a la acogida del próximo barrio: "En otras localidades, los vecinos siempre, han acogido con normalidad la apertura de pisos, centros tutelados y demás". Irazusta asegura no haber tenido nunca el menor problema, porque se trata de enfermos "muy supervisados" y con un perfil previamente "filtrado" por Agifes.

La asociación inauguró el miércoles pasado un invernadero terapéutico en Hernani donde ya emplea a nueve enfermos. Además, está a punto de iniciar la celebración del 25 aniversario que lleva de lucha para "eliminar mitos y romper barreras sobre la enfermedad mental, un objetivo que a día de hoy sigue estando vigente".