Donostia. La empresa Mémora, que se ha hecho con los servicios funerarios de Donostia -con excepción del cementerio y el crematorio- ofrecerá a los clientes la posibilidad de guardar información genética de los difuntos. Esta opción, que se puede efectuar gracias a la extracción de tejidos del fallecido, puede ser útil para la prevención de enfermedades congénitas, entre otras cuestiones.
El almacenaje de la información genética de los antepasados será uno de los nuevos servicios que implantará Mémora "desde mañana (por hoy)", según señaló ayer a este diario el director general de la empresa, Eduard Vidal. El directivo se desplazó a Donostia para firmar la absorción de los servicios funerarios de Polloe SA, cuya prestación por parte de esta empresa municipal fue anulada por los tribunales, a petición de un grupo de funerarias privadas.
Vidal firmó el acuerdo de cesión de los servicios mortuorios con el gerente de Polloe SA, Juan José Martínez, y en presencia del secretario general del Ayuntamiento. Tal y como destacó Vidal a este diario, la adjudicación lograda tras un concurso público en el que tomaron parte cinco firmas "llena de satisfacción" a su empresa, por haber reconocido su "gran capacidad técnica y dilatada experiencia en la gestión de los servicios funerarios, al margen del reconocimiento que supone el haber presentado la mejor oferta técnica".
En concreto, Mémora propuso una aportación económica de 1,4 millones de euros para hacerse con los servicios de tanatorio, transporte, embalsamamiento de cadáveres y otras actuaciones mortuorias, además de subrogar a los 16 trabajadores que, en la actualidad, están empleados en estas tareas y, además, mejorar sus condiciones laborales. Estos añadidos, según la empresa, suponen otros 1,4 millones de euros de gasto, que redundarán en las condiciones laborales de los trabajadores, cuyo futuro les ha tenido en vilo durante varios meses.
Precisamente, esta parte de la propuesta de Mémora inclinó la balanza hacia la firma, de origen catalán y gran implantación en el Estado, con excepción de algunos puntos, como el País Vasco. "Con nuestra presencia en San Sebastián queremos continuar con nuestra estrategia de crecimiento en toda la cornisa cantábrica, con especial atención al País Vasco", declaró Vidal.
A partir de hoy mismo, Mémora se asentará en las oficinas que Polloe posee en el paseo de Duque de Mandas, que le serán arrendadas, y se ocupará del tanatorio de Zorroaga, que también le alquilará la fundación con el mismo nombre. Por otra parte, además de la posibilidad de guardar información genética sobre los antepasados, la empresa funeraria ofrecerá planes de financiación de los servicios dirigidos a las familias.
Empresa fuerte Según explican sus responsables, Mémora es el primer grupo español de servicios funerarios, tanatorios, crematorios y gestión de cementerios. A lo largo del pasado año, llevó a cabo más de 44.000 servicios funerarios y 13.000 incineraciones. El grupo, que también está implantado en Portugal, explota y gestiona 118 tanatorios, 20 crematorios y 25 cementerios.
A lo largo del pasado ejercicio, la facturación del grupo superó los 150 millones de euros. Los trabajadores de la empresa ascienden a 1.300 y las empresas adscritas, a 130. Para el periodo 2010-2012 contempla llevar a cabo una inversión de 40 millones de euros en las distintas zonas del Estado en las que se encuentra en fase de implantación.