El último recambio del PSE-EE

LA ex eurodiputada socialista Barbara Dürkhop, viuda del senador asesinado Enrique Casas, pasará hoy a formar parte de la Corporación donostiarra para llenar el hueco dejado por su compañera de partido, Susana Corcuera, que se despidió de la Corporación en el último Pleno para dedicarse a tareas de su partido así como a su escaño en el Parlamento Vasco.

Dürkhop es un rostro conocido en la política vasca aunque se presentó en el último puesto de la candidatura de Odón Elorza en las últimas elecciones municipales, el número 27. Por ello, para su designación como nueva corporativa, una docena de nombres de la plancha socialista han tenido que renunciar para dejar paso a la veterana política de origen alemán.

La llegada de la nueva corporativa supone el último recambio en el primitivo grupo socialista -el tercero- que ha tenido que ir modificándose a medida que los ediles del PSE-EE han dejado sus puestos electos para dedicarse a otras funciones. Quien fuera concejal de Movilidad, Ernesto Gasco, cambió el pasado verano el Ayuntamiento por la viceconsejería de Transportes del Gobierno Vasco, tras la llegada del PSE-EE a Ajuria Enea. Junto a él se fue también Arritxu Marañón, que optó por quedarse en exclusiva con su escaño en las Cortes de Madrid, para el que había sido elegida en las elecciones generales.

Estas primeras huidas de Igentea obligaron a Elorza a remodelar su gobierno municipal que, en junio, se completó con los nuevos corporativos Maravi Dafauce (Movilidad) y Miguel Ángel Díez Bustos (Medio Ambiente), que ocupaban los puestos 13 y 14, respectivamente, de la candidatura socialista.

Tras esta primera recomposición, y con el presupuesto aún sin elaborar, la concejala de Hacienda, Susana Corcuera, de las más veteranas en la institución municipal, comunicó su decisión de abandonar la Corporación, con lo que quedó vacante un puesto muy delicado, más en tiempo de crisis. Sus funciones serán cumplidas por Susana García Chueca, que traspasa a la delegada Alicia González -no electa- su anterior responsabilidad en Bienestar Social, un cambio que también será ratificado hoy por el Pleno.

Pero si en el PSE se han ido tres de los doce concejales que resultaron elegidos, los abandonos también afectaron a otros cargos, como quien fuera delegado de Cultura, Ramón Etxezarreta, ahora viceconsejero de Política Lingüística del Ejecutivo de Patxi López. Además, altos de cargos de confianza del área de Urbanismo, como el director del departamento Iñaki Atxukarro, y el de Movilidad, Josu Benaito, también acudieron a la llamada del Gobierno Vasco, para ocuparse, respectivamente, de la viceconsejería de Ordenación del Territorio y la dirección de Transportes, lo que provocó nuevos agujeros en el organigrama municipal.

Aunque el PSE-EE ha sido el partido más afectado por las fugas en esta legislatura municipal, otros también han sufrido cambios. Por ejemplo, Juan Aguado (PNV) dejó su puesto a Martin Ibabe, mientras que la popular Mari Carmen Rubio hizo sitio a Isabel Arsuaga.