Compromiso, arrojo y una generosa dosis de pasión son los principales ingredientes para que un proyecto resulte exitoso. Pero también hace falta rodearse de un entorno propicio que apoye la causa, contar con referentes y asumir que puede que esta vez no salga bien. Son las principales conclusiones a las que llegaron las cinco mujeres emprendedoras que participaron el pasado viernes en una inspiradora jornada organizada por la Universidad de Deusto en el campus de Donostia.

Bajo el título Deusto Emprende Diálogos, la mesa redonda, organizada en colaboración con Aspegi y que abundó en el rol desempeñado por la mujer emprendedora, puso el broche de oro a la Semana Deusto Emprende, celebrada del 14 al 18 de noviembre en el campus donostiarra y que ha contado con más de 30 iniciativas enfocadas a fomentar el espíritu emprendedor.

Jaione Izaguirre, directora del centro deportivo Hegalak; Nerea Loron, educadora social y cantante de rap; Tanit Esnal, CEO de la startup Kauka; y las madres fundadoras de la escuela activa Bizilore expusieron su experiencia en el proceso de emprender, un camino que, según advirtieron, está lleno de sombras, pero también de luces.

Abrirse camino en un mundo de hombres

La idea de crear un proyecto deportivo e inclusivo surgió hace diez años y fruto de aquello nació el centro deportivo Hegalak de Donostia. “Nuestro proyecto nace del objetivo de mejorar la calidad de vida de todas las personas, tengan las capacidades que tengan, a través de la actividad física”, relató Jaione Izaguirre, quien confesó que en un inicio la persona candidata a dirigir el proyecto era un hombre. “El del deporte es un ámbito muy masculinizado y cuando asumí el cargo de directora sentí que tenía la necesidad de justificar constantemente que soy yo la directora y, por tanto, soy yo quien toma las decisiones”.

Los estudiantes de Deusto siguieron atentamente las reflexiones que se vertieron en la jornada Deusto Emprende Diálogos, celebrada el viernes en el campus donostiarra. Gorka Estrada

“El género es una mochila muy pesada que nos toca llevar desde que somos pequeñas”

Las participantes coincidieron en señalar la necesidad de contar con referentes a la hora de que otras mujeres también se animen a emprender. “El género es una mochila muy pesada que nos toca llevar desde que somos pequeñas. En mi caso, cuando tenía siete años no podía imaginarme como rapera, ni siquiera me lo planteaba, porque no conocía ninguna chica que cantara rap. Por eso es fundamental empezar por el principio, educando a los niños y niñas en la cultura de la igualdad”, aseveró Nerea Lorón, quien mediante su proyecto de emprendizaje, talleres de rap para el empoderamiento femenino, ha aunado sus dos pasiones: la música y el feminismo. Con un fluido y convincente discurso, Lorón se lamentó de que “a las mujeres nos cuesta mucho poner en valor lo nuestro”. En su caso, el punto de inflexión llegó cuando su novia le animó a ganarse la vida con aquello que sabía hacer. “Hasta entonces, había pasado por un montón de trabajos precarios y cuando vi que era posible vivir de lo que me gustaba hacer, me dije a mí misma que ya no volvería a ser precaria”, reivindicó.

La grandeza de lo colectivo por encima de lo individual

Las motivaciones para embarcarse en un nuevo proyecto pueden ser muy variadas, pero si algo tienen en común es que parten del convencimiento y la pasión. La escuela activa Bizilore de Azkoitia surgió en 2011 de la mano de un colectivo de madres (y algunos padres) que buscaban crear un proyecto del ámbito educativo basado en la educación activa y en la mirada respetuosa hacia el niño. Actualmente, además de la escuela, promueven talleres y cursos de diversos temas de interés dirigidos a la comunidad educativa. 

“El resultado de lo que creamos en colectivo es mucho mayor que lo que creamos como individuo”

“Bizilore nació rodeado de niños portados por sus amas en mochilas o que jugaban a nuestro alrededor. Es un proyecto colectivo llevado a cabo por las familias y los profesionales que integran la escuela”, explicaron dos de las madres fundadoras del proyecto, quienes subrayaron que a lo largo de todo el proceso emprendedor “nuestro mejor apoyo hemos sido nosotras mismas” .

La perseverancia como antídoto contra el miedo al fracaso

Sobre perseverancia giró el relato de Tanit Esnal, quien contó que tres años antes de fundar la exitosa startup que dirige en la actualidad, probó el amargo gusto del fracaso. “Para que una idea tenga éxito es imprescindible creer en ella, pero en ocasiones eso no es suficiente”, reconoció. Actualmente Esnal es CEO de la startup Kauka, un innovador proyecto mediante el cual desarrollan simulaciones virtuales dirigidas a completar la formación sanitaria. En su intervención, Esnal señaló la importancia de conformar un buen equipo profesional, “porque no se trata de que tú lo hagas todo, sino de contar con gente capacitada que permita el desarrollo del proyecto”. 

“Para que una idea tenga éxito es imprescindible creer en ella, pero en ocasiones eso no es suficiente”

La undécima edición de la Semana Deusto Emprende ha puesto el foco en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12, Consumo y producción sostenibles, mediante la organización de actividades y encuentros inspiradores encaminados a la promoción de un estilo de vida más sostenible.

La Semana Deusto Emprende mantiene año tras año los valores que motivaron su puesta en marcha. Por un lado, apreciar la diversidad en su sentido más amplio porque la cooperación con personas de diferentes perfiles enriquece los proyectos y permite ver las cosas desde una perspectiva diferente. Por otro, compartir la firme convicción de querer avanzar hacia un mundo mejor y más justo del que nos hemos encontrado.